Seguridad y salida de estadios

“Si una persona no te demuestra con hechos lo que dice, no vale la pena creer en sus palabras”. Bob Marley

Si el AT&T tuviera mayor capacidad se hubiesen rotos las marcas de asistencia. En las dos fechas de este Clásico de Otoño en La Bahía, la presencia de público, como diría el siempre recordado Cometón, es de brinco y espanto, sobrepasa los 43 mil.

Lo que nos llama la atención es que cuando al Estadio Quisqueya van cinco mil, la entrada es un caos y la salida una pesadilla.

La rapidez con que registra a cada persona en AT&T es digna de elogios y el movimiento vehicular por todos los accesos se realiza sin trauma. A la salida, en 20 minutos todo despejado y decenas de empleados limpiando el entorno.

La seguridad la realizan miembros de la Policía con perros amaestrados y con una seña, el fanático se da cuenta sin protestar que tiene que botar la cerveza.

En el despertar ofensivo del cuarto juego, tuvo mucho que ver el trabajo del domínico-curazoleño Hensley Muelens. Un trabajito extra y el resultado fueron 11 carreras para poner la Serie Mundial a ritmo de bolero.

Relataba Juan Marichal, cuando se habló de amenaza de lluvia, que en la Serie Mundial de 1962, luego del juego quinto entre Gigantes y Yanquis, el 10 de octubre en Nueva York, viajaron a San Francisco para el sexto y séptimo juego en el Candestlick Park.

Cuenta Marichal que un fuerte temporal de lluvia azotó la ciudad y que para no perder la forma, los Yanquis viajaban a Modesto a entrenar, y los Gigantes a San José.

El juego seis fue celebrado el lunes 15 de octubre bien pasado por agua.

Alcídes Escobar, último jugador firmado por Epy Guerrero, ha ligado de hit en 11 de 12 juegos en postemporada...Lorenzo Cain, Escobar y Eric Hosmer tienen 16 hits cada uno en postemporada, empatados en el tercer lugar de la franquicia de Kansas con Lonnie Smith...En el estadio y las tiendas de souvenirs, fuera de la franela de Hunter Pence, que es la que más se vende, de los íconos de los Gigantes sigue la número 24 de Willie Mays, de la que no se ve una es de Barry Bonds...Una bola de la Serie Mundial 2014 original US$40, una gorra US$50 y la de fanático US$35. El jacket original en US$185...Los colegas Enrique Rojas, Leo López, Adelaida Hernández, Juan José Rodríguez y Franklin Mirabal son parte de la historia...Disfrutando la Serie, Pablo Peguero y su familia, al igual que Rossy Marichal y el general Aquino...Ned Yost se queja que mojan más de lo debido la parte derecha de la primera base para evitar buen brinco de sus corredores en el robo de bases. Esa técnica es vieja, Monchin Pichardo se la aplicaba a Miguel Diloné en el Quisqueya. Como dice el viejo “Calda” por hoy me voy porque el frío congela los dedos y algo más.

Twitter: @bienvenidorv

Bienvenido Rojas