Las probabilidades del Licey

“No estés triste, porque no encuentras al amor de tu vida, tal vez su papá usó preservativo ese día...”. Anónimo

Los fanáticos de los Tigres del Licey, en cualquier escenario donde uno se mueve, tienen en la mira de la escopeta la pregunta siguiente:

¿Qué probabilidades tiene el Licey de clasificar?

De entrada vamos a precisar que la probabilidad mide las posibilidades de que un evento ocurra. Expresado matemáticamente, es igual al número de formas que un evento específico puede ocurrir, dividido por el número total de posibles eventos.

A los campeones nacionales les restan 14 juegos por jugar, tres de ellos ante los Toros del Este, que es la diferencia que separa el equipo añil de los romanenses. Más claro, esa diferencia es una probabilidad real para lograr clasificar.

O sea que el Licey tiene probabilidades reales y matemáticas de pelear por la cuarta posición, pero para lograr la hazaña, hay que jugar cada desafío como si fuese el séptimo partido de una Serie Mundial.

En idioma claro, preciso y sencillo, Wally Backman, mánager, y Ricardo Aponte, coach de pitcheo, no pueden manejar los lanzadores como si fuese un juego de entrenamiento, un juego de desarrollo. Cada lanzador tiene que tener el conocimiento de cual será su misión. Porque la probabilidad en este caso sólo tiene rango entre 0 y 1. No se puede inventar.

De no manejar el pitcheo con el criterio de que no hay mañana, la probabilidad de clasificar sería la de que te caiga un rayo, que es de 1 a 3,000,000.

Más claro, el Licey no puede salir al terreno esta noche antes las Estrellas a jugar a la suerte, midiendo la consistencia del pitcher abridor en base a pitcheos pre establecidos. Hay que manejar la intuición.

Los 14 juegos que le restan al Licey son los siguientes: Toros, Escogido, Gigantes y Estrellas, 3 y Águilas, 2. Serán 14 partidos sin mañana, de lo contrario el 21 al estadio Quisqueya le bajarán el “suiche machete”.

Un día como hoy: En 1973, Steve Yeager batea de 5-4 con 4 remolcadas para conducir al Licey a una victoria 8-5 sobre las Águilas en el estadio Cibao.

En 1984, José “Mackey” Moreno, de los Leones del Escogido, en el quinto episodio se estafa su base 80 de por vida.

En 2003, Pete Munro, de los Azucareros, recorre la ruta completa y blanquea 2-0 a los Gigantes 2-0, permitiendo 4 hits.

Las Águilas Cibaeñas han comido con su dama ante los conjuntos de Capital, leáse Tigres del Licey y Leones del Escogido, ante los cuales tienen récord de 11 ganados y 4 perdidos. Frente al Escogido tienen marca de 6-1 y ante el Licey de 5-3. Las Águilas tienen en el “Valle de la Muerte” la fórmula para bajarle el “Cutao” al Quisqueya.

Twitter: @bienvenidorv

Bienvenido Rojas