La necesidad imperó sobre cotización en draft novatos
Nathanael Pérez Neró
SD. Con raras excepciones, la búsqueda de jugadores que puedan rellenar huecos e impactar en el corto y mediano plazo fue la corriente que se impuso ayer en la celebración de la décima edición del draft (sorteo) de novatos del béisbol invernal dominicano.
Esto explica las posiciones donde fueron escogidos jugadores cotizados en los circuitos minoritarios como Manny Machado (Toros, segunda ronda), Carlos Martínez (Águilas, tercera), Kelvin de León (Toros, octava) o Rafael Rodríguez (Gigantes, décima), pero que las posibilidades de jugar en el patio son una gran incógnita.
Las restricciones para usar el pitcheo también se dejó sentir a la hora de agotar los turnos. En las primeras seis rondas apenas se tomaron ocho lanzadores. Todo cambió en la parte final cuando se escogieron 45 pitchers después de la cuarta ronda.
Los Tigres del Licey, que al ocupar el sótano en el torneo pasado escogieron de primero en las 19 rondas, apostaron su primer turno por Rymer Liriano, un jardinero derecho de 20 años que pertenece a los Padres de San Diego, cuyos números confirman los reportes de que tiene las cinco herramientas.
Liriano, firmado por US$300 mil en 2008, batea para .323, 11 jonrones, 51 remolques y 53 robos en 96 partidos en Clase A.
Los azules también tomaron en la segunda ronda a Willy Lebrón, un veterano de 32 años que fue firmado en 2001 y que puede lanzar en lo inmediato.
Las Águilas invirtieron su primer cartucho en Oscar Taveras, un jardinero puertoplatense que batea para .371, seis jonrones, 47 producidas y un porcentaje de embasarse de .426, de San Luis.
Los Gigantes tomaron a Marcel Ozuna, un bateador de poder que ha bateado 19 vuelacercas y remolcado 63 vueltas en la sucursal Clase de los Marlins.
El Escogido, que en las últimas dos temporadas ha sacado provecho inmediato con jugadores como Alexander Valdez y Eury Pérez, tomó al receptor Gary Sánchez, un prospecto al que los Yanquis, dieron un bono de US$2,2 millones en 2009 y que está en duda que juegue, ya que se lesionó esta semana.
Las Estrellas escogieron primero a Ronny Rodríguez, torpedero de Cleveland, cuyos números todavía no impresionan tras 78 partidos y 292 turnos en Clase A.
Los Toros se inclinaron por el zurdo Edward Cabrera, un espigado que ha ponchado a 192 hombres en 150 entradas, con marca de 4-0 y 3.66 de efectividad en 23 partidos.
"Vinimos a fortalecer el outfield (jardines) y a buscar varios lanzadores zurdos. El escenario cambió a partir de la primera ronda, pero conseguimos gran parte de lo que buscábamos", dijo Fernando Ravelo, gerente general del Licey.
Ravelo estuvo acompañado de directivos del Licey, además de Ángel Santana y Patrick Guerrero. Félix Francisco asesoró a los azules desde los Estados Unidos a través de Skype.
La actividad se llevó a cabo en el Salón Multiusos de Claro.
"El sistema de draft ha permitido que los equipos compitan en igualdad de condiciones en la adquisición del talento disponible, dijo Leonardo Matos Berrido, presidente de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (Lidom).
NPerez@diariolibre.com
Esto explica las posiciones donde fueron escogidos jugadores cotizados en los circuitos minoritarios como Manny Machado (Toros, segunda ronda), Carlos Martínez (Águilas, tercera), Kelvin de León (Toros, octava) o Rafael Rodríguez (Gigantes, décima), pero que las posibilidades de jugar en el patio son una gran incógnita.
Las restricciones para usar el pitcheo también se dejó sentir a la hora de agotar los turnos. En las primeras seis rondas apenas se tomaron ocho lanzadores. Todo cambió en la parte final cuando se escogieron 45 pitchers después de la cuarta ronda.
Los Tigres del Licey, que al ocupar el sótano en el torneo pasado escogieron de primero en las 19 rondas, apostaron su primer turno por Rymer Liriano, un jardinero derecho de 20 años que pertenece a los Padres de San Diego, cuyos números confirman los reportes de que tiene las cinco herramientas.
Liriano, firmado por US$300 mil en 2008, batea para .323, 11 jonrones, 51 remolques y 53 robos en 96 partidos en Clase A.
Los azules también tomaron en la segunda ronda a Willy Lebrón, un veterano de 32 años que fue firmado en 2001 y que puede lanzar en lo inmediato.
Las Águilas invirtieron su primer cartucho en Oscar Taveras, un jardinero puertoplatense que batea para .371, seis jonrones, 47 producidas y un porcentaje de embasarse de .426, de San Luis.
Los Gigantes tomaron a Marcel Ozuna, un bateador de poder que ha bateado 19 vuelacercas y remolcado 63 vueltas en la sucursal Clase de los Marlins.
El Escogido, que en las últimas dos temporadas ha sacado provecho inmediato con jugadores como Alexander Valdez y Eury Pérez, tomó al receptor Gary Sánchez, un prospecto al que los Yanquis, dieron un bono de US$2,2 millones en 2009 y que está en duda que juegue, ya que se lesionó esta semana.
Las Estrellas escogieron primero a Ronny Rodríguez, torpedero de Cleveland, cuyos números todavía no impresionan tras 78 partidos y 292 turnos en Clase A.
Los Toros se inclinaron por el zurdo Edward Cabrera, un espigado que ha ponchado a 192 hombres en 150 entradas, con marca de 4-0 y 3.66 de efectividad en 23 partidos.
"Vinimos a fortalecer el outfield (jardines) y a buscar varios lanzadores zurdos. El escenario cambió a partir de la primera ronda, pero conseguimos gran parte de lo que buscábamos", dijo Fernando Ravelo, gerente general del Licey.
Ravelo estuvo acompañado de directivos del Licey, además de Ángel Santana y Patrick Guerrero. Félix Francisco asesoró a los azules desde los Estados Unidos a través de Skype.
La actividad se llevó a cabo en el Salón Multiusos de Claro.
"El sistema de draft ha permitido que los equipos compitan en igualdad de condiciones en la adquisición del talento disponible, dijo Leonardo Matos Berrido, presidente de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (Lidom).
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