Boston espera ola enorme de visitantes por maratón
Dos bombas causaron la muerte de tres personas que participaron en la edición pasada de la carrera
BOSTON, Massachusetts.- Con un incremento en el interés en una de las carreras más importantes del mundo debido al aumento de corredores participantes y el recuerdo de los atentados del año pasado, la edición 2014 del maratón de Boston podría traer una ola de visitantes sin precedente y una inyección de dólares por turismo.
Los organizadores de la competencia, luego de que dos bombas provocaron la muerte de tres espectadores y lesionaron a más de 260 personas el año pasado, aumentaron la cantidad de corredores en aproximadamente 9.000, a casi 36.000. La mayoría -más de 21.000- viene de estados del país fuera de Nueva Inglaterra. Otros 5.330, más o menos, provienen de más de 70 países. El resto son residentes de Massachusetts y estados circunvecinos.
Se espera también la llegada de más espectadores a lo largo de la ruta de 42,1 kilómetros (26,2 millas), la cual inicia en la parte occidental de Boston, en Hopkinton, y termina en el centro en Boylston Street. Usualmente se alinean a lo largo de la carrera cerca de 500.000 espectadores; funcionarios calculan que el lunes la multitud podría ser mayor a un millón.
Nada podría impedir que regrese Sarah Stenn, quien vive en Sagaponack, Nueva York, y terminó el maratón del año pasado aproximadamente 45 minutos antes de que explotaran las bombas.
"El año pasado, todos nosotros vimos lo peor de la humanidad, y esto fue enfrentado con lo mejor de la humanidad", dijo Stenn, quien está realizando el viaje con su esposo, dos hijas y su padre, de 87 años de edad. "Voy a regresar porque quiero que mis hijos y todo el mundo sepa que esta carrera continuará siendo un símbolo de todo lo que es bueno y correcto en la vida, y que ninguna persona o acto arrebatará eso".
Patrick Moscaritolo, presidente de la Oficina de Convenciones y Visitantes de Boston, espera que el maratón generará más de 175 millones de dólares en actividad económica en aproximadamente cinco días, cifra superior a los entre 130 y 140 millones calculados para la edición del año pasado.
"Esta no es una carrera de un día", comentó Moscaritolo. "Nunca lo ha sido, y yo pienso que este año estará muy lejos de eso... Por todo tipo de razones, la gente está viniendo, y quiere estar con los corredores y hacer sentir su apoyo".
Los organizadores de la competencia, luego de que dos bombas provocaron la muerte de tres espectadores y lesionaron a más de 260 personas el año pasado, aumentaron la cantidad de corredores en aproximadamente 9.000, a casi 36.000. La mayoría -más de 21.000- viene de estados del país fuera de Nueva Inglaterra. Otros 5.330, más o menos, provienen de más de 70 países. El resto son residentes de Massachusetts y estados circunvecinos.
Se espera también la llegada de más espectadores a lo largo de la ruta de 42,1 kilómetros (26,2 millas), la cual inicia en la parte occidental de Boston, en Hopkinton, y termina en el centro en Boylston Street. Usualmente se alinean a lo largo de la carrera cerca de 500.000 espectadores; funcionarios calculan que el lunes la multitud podría ser mayor a un millón.
Nada podría impedir que regrese Sarah Stenn, quien vive en Sagaponack, Nueva York, y terminó el maratón del año pasado aproximadamente 45 minutos antes de que explotaran las bombas.
"El año pasado, todos nosotros vimos lo peor de la humanidad, y esto fue enfrentado con lo mejor de la humanidad", dijo Stenn, quien está realizando el viaje con su esposo, dos hijas y su padre, de 87 años de edad. "Voy a regresar porque quiero que mis hijos y todo el mundo sepa que esta carrera continuará siendo un símbolo de todo lo que es bueno y correcto en la vida, y que ninguna persona o acto arrebatará eso".
Patrick Moscaritolo, presidente de la Oficina de Convenciones y Visitantes de Boston, espera que el maratón generará más de 175 millones de dólares en actividad económica en aproximadamente cinco días, cifra superior a los entre 130 y 140 millones calculados para la edición del año pasado.
"Esta no es una carrera de un día", comentó Moscaritolo. "Nunca lo ha sido, y yo pienso que este año estará muy lejos de eso... Por todo tipo de razones, la gente está viniendo, y quiere estar con los corredores y hacer sentir su apoyo".