Agencia mundial antidopaje en un dilema ante caso de Rusia

COLORADO SPRINGS, Colorado. Rusia y su vapuleado programa antidopaje no son los únicos asuntos urgentes que la Agencia Mundial Anti Dopaje (AMA) debe tratar durante las reuniones de esta semana en Colorado. El futuro de la AMA y su papel en el movimiento antidopaje serán puestos a discusión.

Una pregunta clave para la agencia de 16 años de antigüedad durante su reunión del martes y miércoles es saber si permanecerá como un grupo pasivo que revisa los remanentes de los eventos que han sido manchados o si se convierte en un ente que limpie las cosas antes de que se salgan de control.

“En lugar de la zanahoria, necesitas la vara”, afirmó Dick Pound, quien encabezó la comisión independiente que investigó el dopaje en el programa ruso de pista. Pound dijo que la AMA se ha vuelto “tímida” al utilizar el poder para controlar el azote que cree va mucho más allá de los programas rusos de pista y campo.

Líderes del movimiento antidopaje se inclinan por un papel más proactivo, lo que podría significar varias cosas:

—La AMA podría decidir controlar los programas antidopaje de las federaciones deportivas, como el que administra la pista, en vez de permitir que dichas federaciones lleven por sí mismos los programas. Esa es una petición del Comité Olímpico Internacional.

—Podría decidir forjarse un papel más importante en las pruebas y sanciones de naciones bajo sospecha como Rusia. Una manera de hacerlo sería poner las pruebas en manos de agencias que tengan antecedentes confiables, como la Agencia Antidopjae de Estados Unidos o el Centro Canadiense de Ética Deportiva.

—La agencia podría fortalecer su personal de investigación y cumplimiento para tener la capacidad de revisar los problemas que están vigentes y no después de los hechos.

Pero pagar por una AMA reforzada y descifrar la logística no serán tareas sencillas. El presupuesto de la agencia es de unos 26 millones de dólares anuales; la mitad viene por parte del Comité Olímpico Internacional y la otra parte de los gobiernos de varias partes del mundo.

“Si el deporte y el gobierno no tienen el valor para respaldar a la AMA en esto, la causa está perdida”, dijo Graeme Steel, líder de la agencia antidopaje de Nueva Zelanda. “Eso no sería culpa de la AMA, sino de sus integrantes”.

AP