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Si todos los alumnos adquiriesen nivel básico, el PIB anual subiría 3,5 %

El incremento del PIB sería de 15,6 % anual en países de ingreso medio y 27,9 % en los más pobres

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Si todos los alumnos adquiriesen nivel básico, el PIB anual subiría 3,5 %
PARÍS.- El producto interior bruto (PIB) de los países de la OCDE sería, de media, un 3,5 % superior al esperado cada año si se lograra que, en el horizonte de 2030, todos los adolescentes de 15 años estuvieran escolarizados y adquirieran un nivel de conocimientos básicos, revela un informe publicado hoy.

El incremento del PIB sería del 15,6 % anual en países de ingreso medio y del 27,9 % en los más pobres, según el estudio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que subraya la rentabilidad económica que se obtendría con un objetivo considerado al alcance, a la vista de experiencias pasadas.

Los dos autores utilizaron como referente los resultados de 2012 del estudio PISA en matemáticas y ciencias, que evalúa las capacidades en estas materias de los alumnos, y consideraron que un resultado de 420 puntos es el mínimo que todos los adolescentes tendrían que tener a los 15 años.

Por eso, los que más saldrían ganando son los que peores resultados obtuvieron en las pruebas de PISA, y en particular aquellos en la que había una proporción importante fuera del sistema escolar a los 15 años o que no alcanzaban siquiera esos 420 puntos.

Entre los países de la OCDE, México, que era el país con la calificación más baja (414,1 de media y un 53,8 % del total por debajo de los 420 puntos), sería igualmente el que más ventaja sacaría de la elevación del nivel a un listón mínimo en 2030: un 11,8 % de ascenso anual del PIB en los próximas ocho décadas.

Es decir, que el PIB mexicano sería 5,51 veces el actual en 2095 sólo por esos cambios en la formación, sin tener en cuenta otras evoluciones económicas.

Le seguirían en las ganancias potenciales Turquía (un 8,5 % de aumento anual), Chile (8,4 %), Israel (7,6 %), Grecia (6,1 %), Italia (4,5 %), Francia (4,5 %), Suecia (4,4 %) y Luxemburgo (4,4 %).

España (3,7 %) se situaría ligeramente por encima de la media del "Club de los países desarrollados" porque sus resultados de PISA estaban en la parte baja, con 490,4 puntos en matemáticas y ciencias, un 21,1 % de los alumnos examinados que no llegaban a los 420 y un 5 % de los adolescentes de 15 años fuera del sistema escolar.

La economía española sería un 171 % superior a la actual en 80 años únicamente si todos adquirieran conocimientos equivalentes a esos 420 puntos, es decir una ganancia de 2,721 billones de dólares.

Fuera de la OCDE, de los 76 estados objeto del estudio, los que más ventaja sacarían de la generalización del nivel básico educativo serían Ghana (un PIB un 83 % superior cada año de aquí a 2095), Sudáfrica (56,1 %), Honduras (43,1 %), Marruecos (34 %), Omán (30,5 %), Botsuana (27,9 %), Macedonia (24,3 %), Perú (23 %) y Catar (22 %).

Los otros países latinoamericanos analizados obtendrían igualmente avances también significativos: Colombia un alza del 19,5 %), Brasil, un 16,1 %; Argentina, un 14,8 %; Uruguay, un 14 % y Costa Rica, un 9,9 %.

En la introducción del informe, que firman la OCDE y la organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), se insiste en que generalizar un nivel educativo básico como el descrito es un objetivo "completamente realista" en 2030 y la prueba son los logros de algunos países.

Se menciona a Polonia, que en menos de una década ha conseguido reducir la proporción de alumnos que no llegan a los 420 puntos del 22 % al 14 %, y también a Shangai, donde pasaron del 4,9 % al 3,8 %.

Otro caso citado es el de Brasil, que entre 2003 y 2012 consiguió incrementar la proporción de alumnos escolarizados a los 15 años del 65 al 78 %, mientras la calificación de los examinados subía de forma notable, aunque a baremos bajos (de 356 a 391 en matemáticas).

Las dos organizaciones hicieron hincapié en que no hay incompatibilidad entre conseguir una mayor equidad en los resultados equitativos (limitar el fracaso escolar) y al mismo tiempo subir los resultados globales.