Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Actualidad

Estudio advierte de las pérdidas de terrenos irrigados por degradación de sal

Suman el equivalente a la superficie de Francia

Expandir imagen
Estudio advierte de las pérdidas de terrenos irrigados por degradación de sal
Foto NASA
TORONTA, CANADÁ. Un estudio de la ONU dado a conocer ayer señala que la mala gestión de los terrenos irrigados está provocando la pérdida de 2.000 hectáreas al día de suelos agrícolas, lo que supone unas pérdidas de 27.300 millones de dólares al año.

El estudio "Economics of Salt-induced Land Degradation and Restoration" publicado en la revista "Natural Resources Forum" calcula que en los pasados 20 años, las pérdidas de terrenos irrigados degradados por sal suman el equivalente a la superficie de Francia, unos 62 millones de hectáreas.

Esta cifra supone el 20 % de todos terrenos irrigados del mundo.

Manzoor Qadir, subdirector del Instituto para el Agua, Medio Ambiente y Salud de la Universidad de la ONU (INWEH), y el principal autor del estudio, declaró a Efe que la degradación por sal de terrenos irrigados es fruto de la mala gestión agrícola en países desarrollados y en vías de desarrollo.

Según Qadir, la irrigación de terrenos que no están dotados de los apropiados sistemas de drenaje provoca la acumulación de sales en las capas del terreno donde las plantas echan raíces, lo que reduce la productividad agrícola.

Qadir añadió que ante la explosión demográfica que prevé que para 2050 el planeta estará habitado por 9.000 millones de personas, 2.000 millones más que en la actualidad "no podemos permitirnos el perder la productividad de los terrenos afectados por la sal".

Qadir añadió que "es una alarmante problema que afecta la seguridad alimentaria en países en vías de desarrollo" y que el cálculo de 27.300 millones de dólares de coste anual no incluye el daño a las infraestructuras.

Zafar Adeel, director de INWEH, en declaraciones a Efe advirtió que el problema de los terrenos degradados por sal "está directamente relacionado con la mala gestión de los recursos agrícola y acuíferos" y que la comunidad científica ha sido lenta a la hora de detectar la gravedad del problema.

Adeel añadió que "cada semana las pérdidas por degradación por sal equivalen a un área mayor que Manhattan. Una gran porción de las áreas afectadas en países desarrollados ha recibido inversiones en irrigación y drenaje pero la infraestructura no es mantenida o gestionada de forma apropiada".

Entre las áreas más afectadas por este problema, el estudio identificó la cuenca del Mar de Aral en Asia central, la cuenca Indo-Ganges en India, la cuenca del Río Amarillo en China y el valle de San Joaquín en Estados Unidos.

Pero tanto Qadir como Adeel destacaron que los terrenos afectados por la degradación por sal pueden ser restaurados con la plantación de árboles, el arado profundo, el uso de variedades de cultivos más tolerantes a terrenos con elevada acidez y el uso de canales en las zonas afectadas.