Una crítica al urbanismo actual
El arquitecto Teddy Cruz afirma que ¨hemos crecido de manera estúpida¨
Diario Libre
Con un calificativo que encaja a muchas cabezas en el mundo, el arquitecto Teddy Cruz llama la atención sobre la locura con que se ha concebido el urbanismo en grandes y pequeñas urbes. Lo hizo en la tribuna de ArkiForum 2011
Crítico, pero con un ejercicio profesional que muestra su compromiso de tomar acciones para hacer las correcciones urbanísticas que cuestiona, el afamado arquitecto vino al país para compartir su experiencia y sus propuestas. La edición 2011 de ArkiForum constituyó un escenario ideal, porque lo escucharon profesionales dominicanos consagrados, estudiantes y funcionarios vinculados a sectores productivos.
Oriundo de Guatemala, Teddy Cruz es el arquitecto latinoamericano que mayores distinciones ha conseguido en los escenarios de más prestigio de Estados Unidos, Europa y otras fronteras. Obtuvo un máster en Design Studies en la Universidad de Harvard y fundó su despacho de arquitectura e investigaciones urbanas en San Diego, California, en el 2000.
La estupidez de la forma en que han crecido las ciudades la acentúa con el criterio de que no hay manera de que el modelo sea sustentable. Curtido en el uso de las palabras como en el de las líneas que trazan sus diseños, Cruz consideró el modelo urbanístico vigente en gran parte de las ciudades como un esteroide, un símil que remite a imágenes imponentes que esconden desórdenes terribles, insanos en una expresión máxima.
"El problema no es solo cómo hemos crecido, sino cómo lo vamos a resolver", planteó en su disertación, con la insistencia de que no hay cuestionamientos sistemáticos sobre la forma en que las ciudades han crecido y sin esas reflexiones no será posible encontrar soluciones.
UNA ARQUITECTURA POR EL DERECHO CIUDADANO
La política, la economía y todos los sectores que inciden en la vida del hombre no pueden estar ajenos a la crítica pendiente, para asumir los correctivos de lugar, en opinión de Cruz. Todo lo contrario, enfatiza el papel fundamental de las políticas públicas en el rediseño urbanístico, a partir de nuevas visiones y concepciones que tomen en cuenta la calidad de vida de la gente y el respeto al medio ambiente.
Y los arquitectos, ¿qué papel juegan en el tablero? La charla de Cruz dio todas las respuestas posibles a la pregunta que generaba su planteamiento. Los arquitectos tienen la responsabilidad del diseño de los protocolos, de todos los elementos que inciden en el territorio. Es decir, que no pueden ser ajenos al problema, sino agentes de su solución y de las previsiones que los evitarían.
Cruz habla con la propiedad de quien da el ejemplo. Ha sido reconocido internacionalmente por sus investigaciones en la frontera Tijuana - San Diego, donde ha estudiado el problema urbanístico y planteado soluciones con propuestas que ya se encaminan a la ejecución con al menos dos proyectos modelos. En su disertación explicó su proyecto, tras evidenciar la terrible realidad urbana a uno y otro lado de la frontera.
Reconocido con el San Diego AIA Honor Award y el Architectural League of New York Young Architects Forum Award, Cruz se refirió en su charla al planteamiento jurídico con que debe verse la arquitectura. Esta, en su opinión, es un instrumento que debe hacer visible los derechos de los ciudadanos.
Cruz ha visualizado los conflictos que vive el mundo a través del proyecto The Political Equator, que se inicia en la línea que traza la frontera de Estados Unidos y México, pasa por la que separa a Melilla de España y continúa por la zona que enfrentan a Israel y Palestina y sigue hasta cerrar el círculo del planeta.
En su presentación explicó el proyecto que dio lugar al lanzamiento del segundo de cuatro concursos de la Zagreb Society of Architects, con el tema “Borders” (Fronteras), como hilo conductor.
LA VISUALIZACIÓN DEL CONFLICTO
Para Cruz, algo esencial en el ejercicio arquitectónico es aplicar las técnicas y conocimientos aprendidos para evidenciar los conflictos. Lo ha hecho en la frontera entre México y Estados Unidos, y también en Corea, aliado a organizaciones sin fines de lucro.
Se refiere, por ejemplo, a poner de relieve el conflicto que generan las construcciones verticales versus las horizontales, el drama social que supone desmantelar barrios que tenían historia, vecindad y características arquitectónicas propias con patrimonial para crear modernas estructuras de torres de viviendas.
Fue lo que hizo Anyang, Corea del Sur, donde hizo maquetas gigantes de barrios en proyecto de demolición para llamar la atención sobre lo que se iba a triturar para levantar edificios que podrían estar en cualquier parte. Como dijo, egresados de Harvard, probablemente, con grandes conocimientos, pero que en sus proyectos estaban obviando la sustentabilidad que debe conllevar todo proyecto urbano pensado para la gente.
Coevolución y fricción son palabras con las que también define el conflicto, al enfatizar que como arquitectos podemos intervenir para lograr un debate. Subraya la necesidad de vincularse a la gente organizada. En Corea del Sur, estudiantes de arquitectura y dirigentes comunitarios fueron los que trabajaron con él, y Cruz resalta -para insistir en el papel clave de la visión del urbanista- que ni siquiera los activistas comunitarios tenían el dominio del lenguaje necesario para encauzar una discusión que produjera resultados satisfactorios para la causa.
Crítico, pero con un ejercicio profesional que muestra su compromiso de tomar acciones para hacer las correcciones urbanísticas que cuestiona, el afamado arquitecto vino al país para compartir su experiencia y sus propuestas. La edición 2011 de ArkiForum constituyó un escenario ideal, porque lo escucharon profesionales dominicanos consagrados, estudiantes y funcionarios vinculados a sectores productivos.
Oriundo de Guatemala, Teddy Cruz es el arquitecto latinoamericano que mayores distinciones ha conseguido en los escenarios de más prestigio de Estados Unidos, Europa y otras fronteras. Obtuvo un máster en Design Studies en la Universidad de Harvard y fundó su despacho de arquitectura e investigaciones urbanas en San Diego, California, en el 2000.
La estupidez de la forma en que han crecido las ciudades la acentúa con el criterio de que no hay manera de que el modelo sea sustentable. Curtido en el uso de las palabras como en el de las líneas que trazan sus diseños, Cruz consideró el modelo urbanístico vigente en gran parte de las ciudades como un esteroide, un símil que remite a imágenes imponentes que esconden desórdenes terribles, insanos en una expresión máxima.
"El problema no es solo cómo hemos crecido, sino cómo lo vamos a resolver", planteó en su disertación, con la insistencia de que no hay cuestionamientos sistemáticos sobre la forma en que las ciudades han crecido y sin esas reflexiones no será posible encontrar soluciones.
UNA ARQUITECTURA POR EL DERECHO CIUDADANO
La política, la economía y todos los sectores que inciden en la vida del hombre no pueden estar ajenos a la crítica pendiente, para asumir los correctivos de lugar, en opinión de Cruz. Todo lo contrario, enfatiza el papel fundamental de las políticas públicas en el rediseño urbanístico, a partir de nuevas visiones y concepciones que tomen en cuenta la calidad de vida de la gente y el respeto al medio ambiente.
Y los arquitectos, ¿qué papel juegan en el tablero? La charla de Cruz dio todas las respuestas posibles a la pregunta que generaba su planteamiento. Los arquitectos tienen la responsabilidad del diseño de los protocolos, de todos los elementos que inciden en el territorio. Es decir, que no pueden ser ajenos al problema, sino agentes de su solución y de las previsiones que los evitarían.
Cruz habla con la propiedad de quien da el ejemplo. Ha sido reconocido internacionalmente por sus investigaciones en la frontera Tijuana - San Diego, donde ha estudiado el problema urbanístico y planteado soluciones con propuestas que ya se encaminan a la ejecución con al menos dos proyectos modelos. En su disertación explicó su proyecto, tras evidenciar la terrible realidad urbana a uno y otro lado de la frontera.
Reconocido con el San Diego AIA Honor Award y el Architectural League of New York Young Architects Forum Award, Cruz se refirió en su charla al planteamiento jurídico con que debe verse la arquitectura. Esta, en su opinión, es un instrumento que debe hacer visible los derechos de los ciudadanos.
FRONTERAS Y CONFLICTOS
Cruz ha visualizado los conflictos que vive el mundo a través del proyecto The Political Equator, que se inicia en la línea que traza la frontera de Estados Unidos y México, pasa por la que separa a Melilla de España y continúa por la zona que enfrentan a Israel y Palestina y sigue hasta cerrar el círculo del planeta.
En su presentación explicó el proyecto que dio lugar al lanzamiento del segundo de cuatro concursos de la Zagreb Society of Architects, con el tema “Borders” (Fronteras), como hilo conductor.
El objetivo del concurso explica la intención de Cruz: busca que los arquitectos y diseñadores repiensen las Nuevas Fronteras Mundiales mediante la exposición de los conflictos de las regiones fronterizas como instrumento operativo para volver a imaginar nuevos modelos de coexistencia posible.
El concurso registra una idea clave de Teddy Cruz: “El concurso plantea una reconsideración crítica de las regiones fronterizas como laboratorios desde los cuales se puedan imaginar nuevos paradigmas de urbanización y democratización. Estos umbrales críticos amplifican las políticas de migración y ciudadanía, trabajo y vigilancia, al igual que las tensiones entre la expansión y la densidad, el urbanismo formal e informal, la riqueza y la pobreza y las colisiones entre los sistemas naturales y la jurisdicción política, mostrando el conflicto como un instrumento operativo para re-pensar las prácticas artísticas.”
LA VISUALIZACIÓN DEL CONFLICTO
Para Cruz, algo esencial en el ejercicio arquitectónico es aplicar las técnicas y conocimientos aprendidos para evidenciar los conflictos. Lo ha hecho en la frontera entre México y Estados Unidos, y también en Corea, aliado a organizaciones sin fines de lucro.
Se refiere, por ejemplo, a poner de relieve el conflicto que generan las construcciones verticales versus las horizontales, el drama social que supone desmantelar barrios que tenían historia, vecindad y características arquitectónicas propias con patrimonial para crear modernas estructuras de torres de viviendas.
Fue lo que hizo Anyang, Corea del Sur, donde hizo maquetas gigantes de barrios en proyecto de demolición para llamar la atención sobre lo que se iba a triturar para levantar edificios que podrían estar en cualquier parte. Como dijo, egresados de Harvard, probablemente, con grandes conocimientos, pero que en sus proyectos estaban obviando la sustentabilidad que debe conllevar todo proyecto urbano pensado para la gente.
Coevolución y fricción son palabras con las que también define el conflicto, al enfatizar que como arquitectos podemos intervenir para lograr un debate. Subraya la necesidad de vincularse a la gente organizada. En Corea del Sur, estudiantes de arquitectura y dirigentes comunitarios fueron los que trabajaron con él, y Cruz resalta -para insistir en el papel clave de la visión del urbanista- que ni siquiera los activistas comunitarios tenían el dominio del lenguaje necesario para encauzar una discusión que produjera resultados satisfactorios para la causa.
TEDDY CRUZ,
UN URBANISTA GLOBAL
Nació en Guatemala, pero su ejercicio lo ha llevado a tres continentes. Con un master en Estudios de Diseño de la Universidad de Harvard, acumula reconocimientos de prestigio, como el Premio de Arquitectura de la Academia Americana en Roma; el James Stirling Memorial Lecture on the City Prize, del Centro Canadiense de Arquitectura, y la London Scool of Economics. profesor asociado en el Departamento de Artes Visuales en UCSD en San Diego.
UN URBANISTA GLOBAL
Nació en Guatemala, pero su ejercicio lo ha llevado a tres continentes. Con un master en Estudios de Diseño de la Universidad de Harvard, acumula reconocimientos de prestigio, como el Premio de Arquitectura de la Academia Americana en Roma; el James Stirling Memorial Lecture on the City Prize, del Centro Canadiense de Arquitectura, y la London Scool of Economics. profesor asociado en el Departamento de Artes Visuales en UCSD en San Diego.
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