Yuan, el (o él) cuentacuentos

De sus lecturas nació el deseo de escribir. Ese es el orden. Primero lees, luego escribes. Hubo, sin embargo, un ingrediente más: sus dos hijos, Juan Francisco y Josué. A “JuanFra”, el primogénito, dice que le debe su primero libro infantil Cuentos sin ningún porqué. Dice que él le ayudó a recuperar su imaginación y a alimentar su niño interior.

Aunque antes de los cuentos, Yuan Fuei-Liao había escrito tres libros, destinado a un público joven. Ahora tiene tres, de cuentos para niños. Los más recientes son: El macuto mágico y Hacer oír tu voz. El primero publicado por Ediciones SM, de su colección Barco de Vapor. El segundo es sobre los derechos de los niños y las niñas. Yuan escribió un cuento por cada derecho.

Si te lo has preguntado, por sus ojos y su apellido, la respuesta es sí. Es de origen taiwanés pero versión aplatanada. Está casado con Laura Sánchez, la madre de sus dos pequeños clowns. Siempre responde, en esas preguntas obligatorias y repetitivas que obligan a definirse a sí mismo, que es “un humano aspirando a ser más humano” y “un ex-niño aspirando a ser más niño”.

Además de escribir y leer (que ya lo hemos dicho), es un diversionero. Es una palabra que inventó él mismo para explicar cómo se combinan en una sagrada armonía la misión y la diversión. Viaja constantemente ejerciendo ese oficio de “diversionero”. De hecho, quisimos aprovechar para que nos hiciera un acto de magia y nos permitiera, como él, volver a ser como los niños. Mira el video que compartimos al final de este escrito.

Foto y videos: Karla Khouri

Esta es la primera de cuatro entrevistas a escritores (as) interesados en la literatura infantil. Es una serie de entrevistas realizadas como una alternativa al trabajo infantil, a propósito de que el 12 de junio es el Día Mundial contra el Trabajo Infantil.

Nazaret Espinal