Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
economia

Sin sucumbir a la presión

Ante una depreciación monetaria incontrolada, muchos gobiernos hubieran reaccionado estableciendo controles cambiarios, fijando el tipo de cambio y racionando las existencias de divisas para evitar desabastecimientos y alzas de precios.

El gobierno ruso, sin embargo, a pesar de la magnitud de la crisis, está actuando sin trastornar o impedir el funcionamiento del mercado cambiario. Aparte de pedir a empresas estatales que disminuyan sus balances en monedas extranjeras, no ha requerido la entrega forzosa de divisas al sector privado, ni impuesto topes al valor del dólar en rublos.

Tampoco está usando sus muy grandes reservas de divisas para apuntalar artificialmente el rublo, aunque sí para facilitar créditos a las empresas y cumplir con los compromisos de deuda.

El parlamento ruso aprobó de urgencia suplir a los bancos el equivalente en ese momento a 16,500 millones de dólares. Con esos recursos, la capitalización del sector bancario aumentará en 13%, según informó el Ministro de Finanzas.

El mecanismo contempla la emisión de bonos del gobierno en rublos para ser entregados a la agencia de seguro de depósitos, la cual a su vez los entregará a bancos a cambio de valores de deuda o acciones de capital.

La estrategia está funcionando, y el rublo se ha fortalecido un 32% desde su punto más bajo. Ayuda a las medidas que el déficit fiscal ruso es menor que el de muchas de las grandes potencias económicas occidentales.

El presidente Putin confía en que la crisis será resuelta en el 2015 o, en el peor de los casos, para el 2016. Evitó dar en un discurso a la nación la impresión de que actuaría presionado por las circunstancias, prefiriendo adoptar una línea de más largo plazo. Afirmó que la vulnerabilidad financiera de Rusia se debe a su dependencia del petróleo para generar ingresos de divisas, razón por la cual ha prometido desarrollar un programa encaminado a diversificar la economía.