Vista al este
Gustavo Volmar
En momentos en que las Estrellas Orientales luchan por su primera corona en 47 años, en otro escenario también es el este el foco de atención.
El Foro Ministerial entre China y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que tuvo lugar en Beijing este mes, sirvió de ocasión para que la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina (CEPAL) declarara que es “imperativo” que Latinoamérica lleve a cabo una “aproximación estratégica” con China.
La recomendación de la CEPAL enfatiza que uno de los principales objetivos de ese acercamiento es conseguir más inversiones directas chinas en infraestructura y producción. Eso significa que la CEPAL, correctamente, valora más la participación de empresas chinas en la estructura económica de la región que la concesión por parte de China de créditos para financiar la venta de sus productos.
La CEPAL, que a lo largo de su historia ha mantenido una línea de pensamiento recelosa de la gran influencia estadounidense sobre Latinoamérica, expresó también que la evolución y perspectivas de la economía mundial no pueden ser entendidas si no se toma en cuenta el “rol central” que China desempeña, siendo ya la primera economía mundial luego de tres décadas y media de un crecimiento promedio de 10% anual.
La CEPAL reconoce, sin embargo, que el comercio de la región con China está desbalanceado, a favor de China, y que mientras las exportaciones chinas hacia Latinoamérica están diversificadas, las de la región hacia China están concentradas en un pequeño número de productos básicos.
En un informe preparado para la reunión, la CEPAL indica también que China puede ayudar a Latinoamérica en materia de innovación, recursos humanos, productividad, competitividad y exportación. Y señala que el comercio entre ambas partes se multiplicó 22 veces entre el 2000 y el 2013, mientras el comercio total de la región sólo se multiplicó por tres.
Gustavo Volmar
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