Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Actualidad

Ha muerto Roberto Segre

Nació en Milán en 1934. Fue llevado a Buenos Aires en 1939, donde se recibió de Arquitecto en 1960.

Expandir imagen
Ha muerto Roberto Segre
Roberto Segre.
La mala noticia llegó en la mañana. Un motociclista le arroyó en su caminata dominical el pasado lunes, mientras quizás andaba por la parte de Niteroi que mira hacia Río de Janeiro.

Llegó a Santo Domingo en junio de 1985. Venía buceando informaciones textuales y gráficas construidas para sus investigaciones sobre la arquitectura caribeña que le patrocinara la beca Guggenheim de New York. Fue entonces cuando le llamó poderosamente su atención el proyecto del Faro a Colón.

Quedó fascinado de ver, mirar y leer el libro memoria del concurso editado en 1931. Visitó toda la ciudad que pudo alcanzar en medio de protocolares reuniones, y dio varias conferencias en el acogedor auditórium del desaparecido edificio de la Asociación de Industrias.

En 1990 estaba de regreso entre nosotros, que hacíamos la Tercera Bienal de Arquitectura de Santo Domingo que resultó la Primera del Caribe. Le acompañaba su esposa y el maestro Fernando José Salinas González Mendive.

Ese mismo año estuvimos en el II Encuentro de Arquitectura y Urbanismo en Las Antillas, realizado en Fort-de-France, Martinica y al siguiente año, en Santiago de los Caballeros, en el tercero de la saga.

Nacido en Milán, Italia, en 1934, Segre Prando fue llevado a Argentina en 1939 y en Buenos Aires se recibió de Arquitecto en 1960. Tres años más tarde estaba dirigiendo el departamento de Historia de la Universidad de la Habana donde escribiera el libro "Urbanismo y Arquitectura de la Revolución Cubana". Varios sub títulos editoriales salieron de esta obra, entre ellos "América Latina en su Arquitectura" (1975) y "Arquitectura Antillana en el siglo XX" (2004).

Completó una treintena de libros y casi 400 ensayos sobre arquitectura y urbanismo. Las últimas veces que nos vimos fue por la ocasión de la Bienal del Caribe que se realizara en Willemstad, Curazao, en 2003. En el 2006 fue colaborador de la Guía de Arquitectura de Santo Domingo que hiciera la Fundación Erwin Walter Palm para la Junta de Andalucía de Sevilla, España. De cuando en vez, algún correo se nos colaba entre ambos.

La mala noticia llegó en la mañana. Un motociclista le arroyó en su caminata dominical el pasado lunes, mientras quizás andaba por la parte de Niteroi que mira hacia Río de Janeiro, en las inmediaciones del Museo de Arte Contemporáneo que dejara Niemeyer.

Dicen que pudo llegar por sí mismo al hospital pero a sus 79 años, las fuerzas le abandonaron y horas más tarde ya era cadáver. Los que le conocimos, los que aprendimos de él, discutimos y nos hermanamos con él, solo le podemos recordar como fue, tenaz y exigente... Paz a sus restos.