El papa critica recortes sociales se aprovechan de disponibilidad de madres
"Se necesitaría comprender más su lucha cotidiana para ser eficaces en su trabajo"
Diario Libre
CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Francisco criticó hoy que se apliquen recortes de gastos sociales aprovechando la disponibilidad de las madres de familia para sacrificarse por sus hijos.
El pontífice denunció durante la habitual audiencia general de los miércoles en el Vaticano que a veces "se aprovecha de esta disponibilidad de las madres a sacrificarse por sus hijos para ahorrar en los gastos sociales".
Las palabras del papa se conocieron en el contexto de una intervención en la que estimó que se ayuda, escucha y considera "poco a las madres en la sociedad y en las comunidades cristianas".
"A la madre, aunque exaltada desde el punto de vista simbólico, se le escucha poco y se le ayuda poco en la vida cotidiana, y también es poco considerada en su papel central en la sociedad", dijo el pontífice argentino.
Agregó "que también en las comunidades cristianas a la madres no se les considera de manera justa y son poco escuchadas".
El pontífice señaló que "las madres, siempre preparadas para realizar tantos sacrificios por sus hijos y por los demás, necesitarían ser más escuchadas".
"Se necesitaría comprender más su lucha cotidiana para ser eficaces en su trabajo y entender mejor a lo que aspiran para expresar los frutos mejores y auténticos de su emancipación", consideró.
El papa aludió a las madres que reciben la carta que les anuncia que sus hijos han fallecido en la guerra "en defensa de la patria" y aseguró "que las madres son el antídoto más fuerte contra el individualismo egoísta que se expande" y son "las grandes enemigas de la guerra".
También explicó que en las madres se encuentra "la ternura, la dedicación y la fuerza moral, porque son ellas las que dan los primeros rudimentos de la fe; sin ellas no sólo se perderían fieles sino buena parte del calor más profundo de la propia fe".
Por otra parte, también destacó que "algunas veces las mujeres se han rebelado contra su papel de madre, privándose así de esa gran riqueza de ser mujeres y de la vida familiar".
Durante el resumen de su catequesis en español, Francisco también citó al arzobispo de San Salvador Óscar Arnulfo Romero, asesinado el 24 de marzo de 1980, y en proceso de beatificación, al hablar del concepto de "martirio materno".
El pontífice denunció durante la habitual audiencia general de los miércoles en el Vaticano que a veces "se aprovecha de esta disponibilidad de las madres a sacrificarse por sus hijos para ahorrar en los gastos sociales".
Las palabras del papa se conocieron en el contexto de una intervención en la que estimó que se ayuda, escucha y considera "poco a las madres en la sociedad y en las comunidades cristianas".
"A la madre, aunque exaltada desde el punto de vista simbólico, se le escucha poco y se le ayuda poco en la vida cotidiana, y también es poco considerada en su papel central en la sociedad", dijo el pontífice argentino.
Agregó "que también en las comunidades cristianas a la madres no se les considera de manera justa y son poco escuchadas".
El pontífice señaló que "las madres, siempre preparadas para realizar tantos sacrificios por sus hijos y por los demás, necesitarían ser más escuchadas".
"Se necesitaría comprender más su lucha cotidiana para ser eficaces en su trabajo y entender mejor a lo que aspiran para expresar los frutos mejores y auténticos de su emancipación", consideró.
El papa aludió a las madres que reciben la carta que les anuncia que sus hijos han fallecido en la guerra "en defensa de la patria" y aseguró "que las madres son el antídoto más fuerte contra el individualismo egoísta que se expande" y son "las grandes enemigas de la guerra".
También explicó que en las madres se encuentra "la ternura, la dedicación y la fuerza moral, porque son ellas las que dan los primeros rudimentos de la fe; sin ellas no sólo se perderían fieles sino buena parte del calor más profundo de la propia fe".
Por otra parte, también destacó que "algunas veces las mujeres se han rebelado contra su papel de madre, privándose así de esa gran riqueza de ser mujeres y de la vida familiar".
Durante el resumen de su catequesis en español, Francisco también citó al arzobispo de San Salvador Óscar Arnulfo Romero, asesinado el 24 de marzo de 1980, y en proceso de beatificación, al hablar del concepto de "martirio materno".
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