En prisión el exdirector del Seguro Social de Honduras acusado de corrupción
Diario Libre
TEGUCIGALPA. El exdirector del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) Mario Zelaya, quien estaba en paradero desconocido desde enero pasado y está acusado de corrupción, lavado de activos y fraude, entre otros delitos, fue detenido y enviado ayer a prisión por orden de un juzgado de Tegucigalpa.
La portavoz del juzgado que lleva el caso, Bárbara Castillo, dijo a los periodistas que a Zelaya se le dictó "detención judicial por los delitos de lavado de activos y cohecho pasivo impropio".
Castillo agregó que Zelaya, que llegó al juzgado bajo fuertes medidas de seguridad, fue remitido al Primer Batallón de Infantería, donde permanecen recluidos los exviceministros hondureños de Trabajo Carlos Montes y de Salud Javier Pastor, quienes también son acusados de los mismos delitos.
El exalto funcionario también es acusado por la Fiscalía hondureña de los delitos de malversación de caudales públicos, fraude, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de los funcionarios, agregó.
El exdirector del Seguro Social fue detenido la madrugada de este martes en el departamento oriental de El Paraíso, afirmó en una comparecencia el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández.
El mandatario destacó que la aprehensión de Zelaya "es una demostración contundente del funcionamiento diligente y efectivo de las instituciones de seguridad y defensa del Estado", aunque no precisó si la Policía hondureña pagó la recompensa de un millón de lempiras (unos 46.970 dólares) que ofreció en julio pasado a quien diese información sobre su paradero.
Castillo agregó que el próximo domingo se celebrará una audiencia inicial en la que un juez con jurisdicción nacional decidirá si el detenido será enjuiciado por los delitos que le imputa la Fiscalía hondureña.
En Honduras, el delito de lavado de activos es castigado con una pena de entre 15 a 20 años de cárcel, mientras que el delito de cohecho pasivo impropio, con entre uno y cuatro años.
En los últimos meses, las autoridades han incautado a Zelaya varias lujosas residencias, entre otros bienes que eran de él y otros exfuncionarios de la misma institución, valorados en unos 150 millones de lempiras (un poco más de 7 millones de dólares).
La portavoz del juzgado que lleva el caso, Bárbara Castillo, dijo a los periodistas que a Zelaya se le dictó "detención judicial por los delitos de lavado de activos y cohecho pasivo impropio".
Castillo agregó que Zelaya, que llegó al juzgado bajo fuertes medidas de seguridad, fue remitido al Primer Batallón de Infantería, donde permanecen recluidos los exviceministros hondureños de Trabajo Carlos Montes y de Salud Javier Pastor, quienes también son acusados de los mismos delitos.
El exalto funcionario también es acusado por la Fiscalía hondureña de los delitos de malversación de caudales públicos, fraude, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de los funcionarios, agregó.
El exdirector del Seguro Social fue detenido la madrugada de este martes en el departamento oriental de El Paraíso, afirmó en una comparecencia el presidente hondureño, Juan Orlando Hernández.
El mandatario destacó que la aprehensión de Zelaya "es una demostración contundente del funcionamiento diligente y efectivo de las instituciones de seguridad y defensa del Estado", aunque no precisó si la Policía hondureña pagó la recompensa de un millón de lempiras (unos 46.970 dólares) que ofreció en julio pasado a quien diese información sobre su paradero.
Castillo agregó que el próximo domingo se celebrará una audiencia inicial en la que un juez con jurisdicción nacional decidirá si el detenido será enjuiciado por los delitos que le imputa la Fiscalía hondureña.
En Honduras, el delito de lavado de activos es castigado con una pena de entre 15 a 20 años de cárcel, mientras que el delito de cohecho pasivo impropio, con entre uno y cuatro años.
En los últimos meses, las autoridades han incautado a Zelaya varias lujosas residencias, entre otros bienes que eran de él y otros exfuncionarios de la misma institución, valorados en unos 150 millones de lempiras (un poco más de 7 millones de dólares).
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