La SIP: libertad de expresión ha sufrido crecientes retrocesos en A.Latina

SANTIAGO DE CHILE.- La libertad de expresión ha sufrido crecientes retrocesos en los últimos años en América Latina, señaló José Miguel Vivanco, director de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), durante un foro en la Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en Santiago de Chile.

Vivanco responsabilizó a los Gobiernos de gran parte de los países de promover y respaldar iniciativas que ponen por encima la potestad de los Estados por sobre los derechos individuales de las personas.

"La libertad de expresión no sólo es poder decir lo que uno piensa, dar y recibir información, sino también no recibir represalias económicas, físicas o legales por hacerlo", dijo el director regional de la organización defensora de los derechos humanos.

"Implica también que los Gobiernos no impongan restricciones ni medidas que busquen influir en el contenido de las informaciones, opiniones o cualquier tipo de expresiones", añadió.

A su juicio, esa tendencia ha ido aumentando en muchos Estados en lugar de retroceder y es parte "de lo que llamaría un proceso de paralización de los compromisos colectivos para promover la democracia, las libertades públicas y por supuesto la libertad de expresión".

Como un ejemplo de esta situación, Vivanco citó un acuerdo refrendado por los países miembros de la Comunidad de Estados Americanos y del Caribe (Celac) realizada en enero La Habana, en la que los países miembros acordaron los derechos inalienables de los Estados por sobre lo de los individuos.

Para Vivanco, ello implica poner por encima de las libertades de las personas los derechos del Estado que debería ser el encargado de protegerlos y garantizarlos.

También cuestionó como un atentando a la libertad de expresión que en la misma declaración se haya reivindicado en términos absolutos el principio de soberanía nacional que "habitualmente se usa como escudo para impedir el escrutinio externo y el debate público respecto a los abusos que se cometen en un país".

"Esto hace que la carga sea muy difícil cuando uno quiere promover y exigir a estos Estados que cumplan con sus obligaciones colectivas defender la libertad de expresión, las libertades públicas y los derechos humanos", indicó.

"Hay que denunciar y hay que exigirle a los Gobiernos una explicación respecto de este tipo de acuerdos, porque de lo contrario cada vez vamos perdiendo terreno", agregó.

Vivanco hizo especial mención a la situación de Venezuela donde consideró que las masivas protestas contra el Gobierno han derivado en "brutal represión" contra los participantes y también agresión a los medios de prensa y los periodistas con el afán de impedir informar esos hechos.

"EL Gobierno arremetió contra los medios, los periodistas y especialmente contra quienes filmaban las manifestaciones con el evidente afán de que se diera a conocer lo ocurrido", dijo.

"Las denuncias son muy serias y especialmente dirigidas a castigar y a evitar que el mundo conociera lo que está ocurriendo en Venezuela", añadió.

Según Vivanco es imprescindible que las organizaciones sociales, los medios, los periodistas y los Gobiernos comprometidos con los valores democráticos reaccionen en contra de este tipo de situaciones.

Pero su balance no es optimista, ya que estima que en los años recientes ha habido un franco retroceso en la promoción de los valores tendientes a profundizar la democracia y la libertad de expresión.