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Los socialistas no supieron sacar partido del descontento de los portugueses

Según los analistas, en los resultados prevaleció lo de ‘más vale malo conocido que bueno por conocer’ y también pesaron algunos casos de corrupción que salpicaron de lleno al PS.

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Los socialistas no supieron sacar partido del descontento de los portugueses
Líder de la Oposición y el secretario general del Partido Socialista portugués (PS) Antonio Costa mira después de pronunciar un discurso tras los resultados electorales. (EFE/EPA/MARIO CRUZ)

LISBOA. El opositor Partido Socialista (PS), considerado el gran derrotado en las legislativas de Portugal este domingo, no supo aprovechar el descontento de los portugueses con las duras políticas de recortes ejecutadas por los conservadores.

La eurodiputada del PS luso, Ana Gomes, dijo hoy a Efe que los resultados, que dieron un triunfo a la gubernamental centro-derecha (38 %), demuestran que “no se aprovechó” electoralmente la recesión más aguda que se recuerda en Portugal, algo que sí supo hacer el marxista Bloque de Izquierda, hermanado con el Podemos español y el Syriza griego en el Parlamento Europeo (PE).

“Hubo una campaña demasiado centrada en el programa del PS” y no en explotar las debilidades de la alianza conservadora en el Gobierno, arguyó Gomes, considerada una de las eurodiputadas más combativas de su formación.

A su juicio el PS dejó marchar cientos de miles de votos para la izquierda más radical del Bloque de Izquierda (BE, por sus siglas en portugués), que obtuvo su mejor resultado, con el 10 % de sufragios (medio millón de votos y 19 de los 230 diputados).

“Hubo errores estratégicos y tácticos. También se dieron condiciones adversas en el plano nacional y europeo”, ahondó Gomes, quien rehusó analizar en profundidad cuáles fueron esos errores, en vísperas de la reunión de la comisión política del Partido en la que se pondrán sobre la mesa los decepcionantes resultados (32 % de los votos y 85 asientos).

Los socialistas, que se han turnado en el poder con el PSD desde que Portugal instauró la democracia hace 40 años, acogieron con pesar unos resultados que no se imaginaban hace meses, cuando el partido se relanzaba bajo el liderazgo del carismático y popular ex alcalde de Lisboa António Costa.

Según los analistas, en los resultados prevaleció lo de ‘más vale malo conocido que bueno por conocer’ y también pesaron algunos casos de corrupción que salpicaron de lleno al PS, como el encarcelamiento del ex primer ministro José Sócrates por sospechas de corrupción.

La victoria relativa de la coalición centro-derechista que encabeza el primer ministro Pedro Passos Coelho se ha asumido como un aval al draconiano plan de recortes sociales, subidas de impuestos y privatizaciones que puso en marcha su Ejecutivo a cambio de recibir un rescate financiero de la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

No obstante, el triunfo de Passos Coelho, explicado también por la mejora de la economía y la bajada del paro, se quedó lejos de la mayoría absoluta, por lo que necesitará el apoyo de la oposición para aprobar leyes claves como la de los Presupuestos del Estado.

Según Gomes, el PS tendría que plantar cara a los conservadores y tender puentes con las formaciones más a la izquierda para frenar las políticas de recortes de los últimos años.

La dirigente recordó que hay que tener en cuenta que la mayoría del parlamento es de izquierdas, si se suman los apoyos del PS, del BE y de la coalición del Partido Comunista (PCP) y los Verdes que, bajo la marca CDU, aglutina en torno al 8 % de los votos.

Los tres suman el 50 % de los sufragios (2,7 millones de votos), frente al casi 40 % de los conservadores (2 millones).

Prácticamente descartada la CDU por su ortodoxia, la eurodiputada abogó por entablar un diálogo con el BE, un partido que nació en 1999 como un aglomerado de movimientos sociales de izquierda, como los feministas, con partidos de inspiración trotskista y marxista.

“Desde mi punto de vista, no sería concebible” que el PS consistiera en el Parlamento la formación de un Gobierno de la coalición de centro-derecha”, concluyó Gomes.

El secretario general socialista, António Costa, aún no ha dado pistas sobre los próximos pasos del partido, aunque en su primera comparecencia tras conocerse los resultados dejó entrever que descarta un pacto gubernamental a la izquierda.

Después de que el PS venciese las municipales de 2013 y las europeas de 2014, algunas corrientes del partido comienzan a cuestionar el liderazgo de Costa, que llegó al poder en unas primarias extraordinarias tras desbancar al que era el líder António José Seguro (2011-2014).

Costa decidió avanzar a la secretaría general por sorpresa esgrimiendo que el triunfo socialista en las europeas había sido pírrico.

El revés de este domingo ha despertado algunas voces de la oposición interna del PS, como la de Álvaro Beleza, antiguo socio de Seguro, que aboga por una renovación de la dirección.

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