Tribunal ordena que Duvalier sea llevado a próxima audiencia
El ex mandatario no se ha presentado en tres ocasiones a la audiencia a las cuales se le ha citado
Diario Libre
PUERTO PRÍNCIPE.- Un tribunal de Puerto Príncipe citó hoy por cuarta vez al expresidente de Haití Jean Claude Duvalier (1971-1986), acusado de crímenes de lesa humanidad y desvío de fondos y ordenó que sea llevado a su presencia, después de que el exmandatario no se presentara en tres ocasiones.
Los jueces del tribunal de apelación convocaron una nueva audiencia para el 28 de febrero y advirtieron que la presencia del expresidente vitalicio es obligatoria. Al término de la sesión, uno de los magistrados declaró que "conviene ordenar que sea llevado (al tribunal) para ser escuchado".
Duvalier, objeto desde principios de 2011 de una veintena de denuncias, debía acudir personalmente ante el tribunal, según lo establecido en la vista del pasado 7 de febrero, donde el considerado exdictador se hizo representar por sus abogados, al igual que en la celebrada el 31 de enero.
Una vez más fueron éstos quienes representaron hoy al mandatario ante el tribunal, que debe decidir si es válida la decisión adoptada en primera instancia de tramitar la causa contra él solo por malversación de fondos y no por crímenes de lesa humanidad como reclaman las organizaciones y afectados que presentaron querellas contra el antiguo presidente.
La ausencia de Duvalier ante el tribunal no causó mayores sorpresas si se toma en cuenta que la víspera su abogado, Reynold Georges, anunció a la prensa que el expediente de su defendido fue llevado ante el tribunal de casación, la más alta jurisdicción haitiana, que dicta decisiones sin posibilidad de recurso.
También dijo que la defensa rechaza la "competencia del tribunal de apelación" para proseguir el expediente. Sin embargo, el tribunal argumentó hoy que, independientemente de esto, el caso deberá continuar en la corte de apelación, por lo que convocó a una nueva audiencia y dijo que la presencia de Duvalier es "imperativa".
La vista transcurrió con normalidad y, contrario a las dos anteriores, no se observó la presencia de seguidores del exdictador, pero sí la de representantes de organismos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que siguen el expediente.
Daniele Magloire, representante del Comité contra la Impunidad, que agrupa a querellantes, dijo que la "Policía debe ir a buscar a Duvalier y llevarlo ante el tribunal". Expresó satisfacción por la decisión pero también inquietud, porque, según sostuvo, Duvalier dispone de un pasaporte diplomático y puede viajar al extranjero en cualquier momento.
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, por su parte, recordó hoy desde Suiza a las autoridades haitianas que los abusos cometidos durante el régimen de Duvalier no deben quedar impunes.
Pillay señaló que no hay un plazo de prescripción para crímenes internacionales, como la tortura, las ejecuciones extrajudiciales, las desapariciones forzadas y las violaciones, bajo la ley internacional. El exgobernante, quien regresó al país en enero de 2011 tras 25 años de exilio en Francia, es considerado un dictador al que organismos de defensa de los derechos humanos atribuyen la muerte o el exilio de más de 30.000 personas.
Los jueces del tribunal de apelación convocaron una nueva audiencia para el 28 de febrero y advirtieron que la presencia del expresidente vitalicio es obligatoria. Al término de la sesión, uno de los magistrados declaró que "conviene ordenar que sea llevado (al tribunal) para ser escuchado".
Duvalier, objeto desde principios de 2011 de una veintena de denuncias, debía acudir personalmente ante el tribunal, según lo establecido en la vista del pasado 7 de febrero, donde el considerado exdictador se hizo representar por sus abogados, al igual que en la celebrada el 31 de enero.
Una vez más fueron éstos quienes representaron hoy al mandatario ante el tribunal, que debe decidir si es válida la decisión adoptada en primera instancia de tramitar la causa contra él solo por malversación de fondos y no por crímenes de lesa humanidad como reclaman las organizaciones y afectados que presentaron querellas contra el antiguo presidente.
La ausencia de Duvalier ante el tribunal no causó mayores sorpresas si se toma en cuenta que la víspera su abogado, Reynold Georges, anunció a la prensa que el expediente de su defendido fue llevado ante el tribunal de casación, la más alta jurisdicción haitiana, que dicta decisiones sin posibilidad de recurso.
También dijo que la defensa rechaza la "competencia del tribunal de apelación" para proseguir el expediente. Sin embargo, el tribunal argumentó hoy que, independientemente de esto, el caso deberá continuar en la corte de apelación, por lo que convocó a una nueva audiencia y dijo que la presencia de Duvalier es "imperativa".
La vista transcurrió con normalidad y, contrario a las dos anteriores, no se observó la presencia de seguidores del exdictador, pero sí la de representantes de organismos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que siguen el expediente.
Daniele Magloire, representante del Comité contra la Impunidad, que agrupa a querellantes, dijo que la "Policía debe ir a buscar a Duvalier y llevarlo ante el tribunal". Expresó satisfacción por la decisión pero también inquietud, porque, según sostuvo, Duvalier dispone de un pasaporte diplomático y puede viajar al extranjero en cualquier momento.
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, por su parte, recordó hoy desde Suiza a las autoridades haitianas que los abusos cometidos durante el régimen de Duvalier no deben quedar impunes.
Pillay señaló que no hay un plazo de prescripción para crímenes internacionales, como la tortura, las ejecuciones extrajudiciales, las desapariciones forzadas y las violaciones, bajo la ley internacional. El exgobernante, quien regresó al país en enero de 2011 tras 25 años de exilio en Francia, es considerado un dictador al que organismos de defensa de los derechos humanos atribuyen la muerte o el exilio de más de 30.000 personas.
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