Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Actualidad

“Cuando veo a mi hijo corriendo y bien, entonces yo soy feliz”

Expandir imagen
“Cuando veo a mi hijo corriendo y bien, entonces yo soy feliz”
Walkiria Soto y su pequeño Darwin Ramsés. | Fotografo: Bayoan Freites

Adolescente • Walkiria Soto Sánchez

A pesar de su juventud (16 años) habla con cierta certeza de la responsabilidad que representa tener un hijo. Sabe que muchas cosas han cambiado en su vida, pero una cosa tiene clara: seguir estudiando.

P. Cuando te enteraste que estabas embarazada, ¿cómo reaccionaste?

R. Me puse a llorar.

P. ¿Cómo lo tomaron tus familiares y amigas?

R. Mi mamá se enteró, y me dijo que lo aceptara, que todo iba a salir bien y que ella me iba a ayudar. Algunas de mis amigas me rechazaron, y me sentí un poco mal, pero al poco tiempo también quedaron embarazadas.

P. ¿Qué pasó en la escuela?

R. Me dejaron terminar el año, pero luego me botaron.

P. ¿Sigues estudiando?

R. Sí, ahora estoy cursando el tercero del bachillerato por las noches.

P. ¿Por qué elegiste tenerlo?

R. Porque no quería sacármelo, eso se ve como feo.

P. ¿Qué cambió en tu vida?

R. Muchas cosas. Sigo estudiando, pero tengo metas que ahora no sé si pueda cumplir, porque tengo que cuidar al niño.

P. ¿Qué sueños tenías?

R. Quería ser ingeniera civil. Mi mamá me dice que esa carrera es muy cara, que si en la UASD...

P. ¿Qué dejaste de hacer?

R. Dejé el coro con las amigas y esas cosas de niñas (ella ríe). Paralicé la diversión, salir a bailar y cosas así.

P. ¿Qué sentías mientras tu bebe crecía?

R. Me sentía rara, pero feliz.

P. ¿Cómo fue el parto?

R. No me dieron dolores, y me tuvieron que hacer cesárea porque el bebé tenía 8 libras, y me dijeron que yo era muy pequeña para poder pujarlo.

P. ¿Quedaste con algún mal recuerdo o trauma?

R. La barriga me quedó con muchas estrías, y yo me ponía a llorar, pero eso ya no me interesa; yo veo a mi hijo bien, corriendo, y yo me siento feliz.