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Buhoneros en la París: Un espacio público que perdió la ciudadanía

Plaza iniciada hace dos años por el ADN no será terminada en la actual gestión

SANTO DOMINGO. Las calles y aceras están ocupadas. En medio de un desorden que salta a la vista y una higiene que se hace extrañar, una esforzada vendedora desenreda los nudos de varios sacos cargados de ropa usada ante la mirada sigilosa y ansiosa de varios compradores en espera de que “se abra la paca”. Las mesas colocadas en la avenida París han creado callejones y laberintos por donde los transeúntes deben moverse con especial habilidad.

Debajo del elevado, se ofertan pantis, sostenes, calzados y todo tipo, incluso de las grandes marcas, a precios de hasta RD$ 10 por pieza. También hay carteras, juguetes, utilería deportiva, enseres, herramientas y comida en oferta para las ávidas clientas que navegan en los ríos de tela en busca de algún artículo.

A ambos lados de la avenida París, en el tramo comprendido entre la Jacinto de la Concha y la José Martí, los tarantines donde se han instalado puestos de víveres, frutas, especias, bisutería y frituras se adueñan de parte de la vía pública, lo que ralentiza y obstaculiza el tránsito tanto a pie como en vehículos.

“El transito está muy congestionado deberían de ubicarlos en algún lugar donde se pueda ir a comprar sin tener que pasar tanto trabajo como uno pasa en la Duarte”, considera María Santana, quien suele acudir a esta zona donde conviven las grandes tiendas con los vendedores callejeros.

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“El transito está muy congestionado deberían de ubicarlos en algún lugar donde se pueda ir a comprar sin tener que pasar tanto trabajo como uno pasa en la Duarte”, considera María Santana, quien suele acudir a esta zona donde conviven las grandes tiendas con los vendedores callejeros.

También los choferes que transitan por la zona se quejan por la lentitud de la circulación vehicular y relatan que en ocasiones se toman entre 25 y 30 minutos para un trayecto de 235 metros de longitud. “Ese desorden hay que acabarlo aquí, la gente se ha cogido to´”, reclamaba Fernando Brito, un conductor de guagua pública que explicaba debía desviarse por la avenida México o de lo contrario le tomaría “horas” cruzar hasta el puente Juan Pablo Duarte.

En 2011 el Ayuntamiento del Distrito Nacional había anunciado la construcción de una plaza para buhoneros en la avenida París esquina Jacinto de la Concha y en la que se ubicarían los comerciantes en 53 puestos en casetas de un nivel con el fin de desalojar las áreas públicas que aún son ocupadas por los comercios informales.

La construcción a cargo de la empresa Badía Tillan fue iniciada en mayo del 2014 a un costo de RD$ 13 millones, sin embargo en la actualidad la obra se encuentra paralizada y su entorno e interiores lucen en descuido con un vertedero improvisado en las afueras.

“Hace más o menos un mes que fuimos donde la secretaria general y le dejamos un escrito pidiéndole que el síndico terminara la plaza, pero ellos no nos han dado contesta”, revela el secretario general de la Asociación de Buhoneros del Distrito Nacional (ABUDINA), Manuel de Jesús Spencer, quien estima “necesario” y “urgente” el traslado de los vendedores ambulantes hacia la nueva plaza para poder ofrecer un servicio de mayor calidad a sus clientes.

“No resulta fácil (caminar) porque ocupan demasiados espacios, las aceras se hicieron con un fin de uno poder pasar y moverse porque para eso están las tiendas”, observaba Osairis Rosario, quien con un bebé cargado y otro de manos se paseaba con dificultad se paseaba con dificultad por entre los cachivaches ubicados próximo a la intersección de las avenidas París y Duarte.

Diario Libre intentó obtener explicaciones sobre la problemática en esta a través de las direcciones de Comunicaciones, Planeamiento Urbano e Infraestructura Urbana del Ayuntamiento pero no fue posible obtener ninguna respuesta al respecto por parte del personal de allí.

Con pesimismo, Pesimista, el secretario general de ABUDINA no cree que por el momento vayan a dejar las calles, ya que no ve el interés desde el cabildo para completar el traslado de los vendedores hacia el nuevo recinto en construcción. “En cuanto a esta plaza, por lo visto el alcalde (Roberto Salcedo) no la va a terminar”.

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