Guía para extranjeros oferta el turismo médico en la República Dominicana

Santo Domingo. La República Dominicana ya cuenta con la primera guía de turismo de salud para promover en el extranjero diferentes servicios médicos como cirugías plástica y de pérdida de peso, evaluaciones, tratamientos cardiológicos, oftalmológicos y dentales, y procesos de fertilidad.

La publicación es de la Asociación Médica de Turismo, y avala al país como certificado para ser un destino internacional confiable en temas de salud. Se distribuirá a los pacientes y aseguradoras, y en conferencias. Estará disponible en medicaltourism.com y en formato de eBook a través de Amazon, Kindle y iTunes.

Destaca el ahorro en los procesos, y pone como ejemplo que una cirugía de estiramiento facial costaría en Nueva York entre US$15 mil y US$20 mil, mientras que si el interesado se traslada desde esa ciudad a la República Dominicana, gastaría unos US$6,150, que comprenden US$4,000 por el procedimiento, US$800 por el pasaje en avión (paciente y acompañante), US$700 para hospedaje por siete noches, US$350 para alimentación, US$200 para excursiones en la ciudad y US$100 para “souvenirs”.

La guía, escrita en inglés, describe las facilidades a nivel de infraestructura y la preparación internacional de los recursos humanos de diferentes centros de salud. Estos son: el Centro de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), el Center for Global Health & International Medicine (CGHIM), el Hospital General de la Plaza de la Salud, el Hospital Metropolitano de Santiago (HOMS) y el Grupo Rescue. MM

Para explicar la preparación del país en materia sanitaria, se informa en la guía que República Dominicana tiene más de 1,300 establecimientos públicos con varios niveles de atención, con más de 12 mil camas. También, que existe una larga red de proveedores del sector privado, que suman más de 7 mil, clasificados en más de 400 hospitales, 500 centros de diagnóstico y cerca de 4 mil consultorios médicos. El resto son farmacias, centros oftalmológicos y clínicas pequeñas.

Se explica que el sector privado cuenta con un grupo de proveedores de calidad mundial con certificación tecnológica y con recursos humanos entrenados en los Estados Unidos.

Mariela Mejía