Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
opinion

Fetiches económicos

Abimbao, veo cosas que me dan miedo.

-Cucharita, no creo que sea mucho lo que puedas ver, ya que estás ciego del entendimiento.

-Menos bromas conmigo, patrón. ¿Sabía usted que algunos dirigentes han puesto fetiches en el altar de la economía, que la sumerge en una red mágica, religiosa?

-Cucharita, ¿de qué ritual me hablas?

-Ha habido y hay dirigentes, políticos y económicos, y grupos de interés, que no cesan de reforzar el culto al personalismo. Y, a esos fines, han utilizado y utilizan como tótem la bandera de la estabilidad.

-Esa es la historia del subdesarrollo.

-Sí, pero acabe de comprender, si es que cabe en su cabeza amueblada por esa infeliz greña, que esos dirigentes y grupos quieren hacer creer que una economía es estable cuando el tipo de cambio no se mueve, o se mueve poco, sin que importe lo que ocurra con todo lo demás.

-Claro, Cucharita. Esa es una escuela, ya vieja, de pensamiento dominicano, y al mismo tiempo nido de prosperidad para unos pocos, basada en la permanencia en el poder en detrimento de las instituciones, y en precios relativos distorsionados, que equivalen a mantener una economía extractiva, erigida sobre una especie de feriado aduanero. Para esa gente el caldo de cultivo ideal es que la economía esté desvencijada, que el dominicano pase crujía, sea pobre, e ignorante.

-Carajo, Abimbao, ¿pero cómo es posible que se haya llegado a creer en las bondades de una estabilidad divorciada de logros sociales, o en la que los fundamentos económicos no sean sanos? ¿Es que estamos ciegos?

-Mira, te invito a que, si quieres entenderlo mejor, apliques el concepto de equilibrio.

-Y, ¿qué significa?

-Escucha. Sólo cuando las principales variables de una economía están en equilibrio, puede afirmarse que se ha alcanzado una situación de estabilidad, de reposo, sobre todo si hubiera pleno empleo de los recursos. En cambio, cuando esas variables están en desequilibrio, es evidente que se alejan de la situación de estabilidad.

-Abimbao, suena lógico.

-Afirmo y defiendo que es necesario que las variables significativas estén en equilibrio para que pueda hablarse de estabilidad. Y no lo están.

-¡Bien! ¡Bien! ¡Ra ra rá! ¡Bien! Carajo, pero si lo que existe es el desequilibrio, ¿cómo es que, por ejemplo, el tipo de cambio puede mantenerse estable en términos nominales?

-Bueno, puede ocurrir porque se maneje la economía con el propósito de obtener resultados que sean aparentes a propósitos políticos y de mantenerse en el poder, pero conseguidas a un costo muy alto y en detrimento del desarrollo de la sociedad. En el fondo es un tente ahí que facilita gozar la fiesta del consumo para pasar penurias mañana.

-¿No me diga? ¿Y en qué cabeza cabe mantener a la población en el subdesarrollo, con tal de seguir adorando un fetiche, regodeándose y embriagándose con las mieles del poder? Y, ¿es ese nuestro caso?

-Respóndete tú, luego de ver los números.

-¡Tírelos!

-Al finalizar el 2012 se decía que el déficit fiscal consolidado superaría el 7% del PIB; el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos también quedaría alrededor del 7% del PIB; la deuda pública se ha multiplicado por cinco desde el 2000; la deuda cuasi fiscal sobrepasa los RD$350,000 millones; el sector eléctrico navega en el caos y consume recursos públicos por cerca de US$1,200 millones.

-Ah, no sabía que era tanto.

-Pues, sigue contando. Las reservas internacionales apenas alcanzan para algo más de dos meses de importaciones; el consumo absorbe casi el 95% del PIB, mientras la inversión es baja; el ahorro nacional se ha desplomado; el crédito al sector privado está estancado y en cambio florecen las operaciones de tesorería; el mercado laboral tiende cada vez más a la informalidad y a estar desprotegido de la seguridad social. Y, por si fuera poco, estamos frente a un proceso masivo de desnacionalización, pues el mercado laboral se inunda de inmigrantes ilegales. ¿Quieres algo más?

-No. Concluyo que la economía dominicana puede que haya tenido y tenga un tipo de cambio que se mueva poco, y a eso se le rinde culto, pero comprendo y respaldo que sólo podría decirse con propiedad que la economía es estable cuando se hayan corregido los grandes desequilibrios, antes de que exploten como burbujas y afecten también al tipo de cambio. Cuando se hayan corregido, los fundamentos de la economía serán sólidos, no antes. Y la estabilidad del tipo de cambio será real. ¿Verdad que lo entendí?

-Sobresaliente, Cucharita. Esto ocurre porque la sociedad está huérfana de paradigmas, descontaminados del afán personalista, y carente de instituciones fuertes.

-¡Soooopla!

edogarmi.fullblog.com.ar

La economía

es estable cuando

se hayan corregido

los grandes

desequilibrios.