¡Por fin sensatez!

El innecesario acuerdo firmado ayer entre el sindicato de profesores y el Ministerio de Educación para concentrarse en resolver la crisis y no en las medidas de presión, demuestra una vez más que la sensatez es posible.

El acuerdo era innecesario, porque esa era la actitud que debieron haber tomado ambas partes desde el principio. Así, no se hubiesen perjudicado los alumnos ni se habría introducido otro motivo de frustración al ambiente nacional.

Los maestros tienen que ser ejemplo para la sociedad. No es que se le pida mucho, es que quien acepta esa especie de sacerdocio está obligado a una conducta diferente que el resto de la comunidad.

Si la sociedad dominicana peleó por una educación de calidad no fue para que maestros y autoridades sacaran lo peor de sí, particularmente cuando lo que se discutía era el monto y no el principio.

Maestros bien pagados son necesarios, pero los actuales maestros tendrán que probar ahora que era un problema de paga, y no otro, el que afecta a la educación nuestra.

Diario Libre