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Huracanes, fenómeno El niño y el 9-1-1

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Huracanes, fenómeno El niño y el 9-1-1

La temporada de huracanes correspondiente a este año 2014 es catalogada por los expertos como tranquila o con actividad tropical por debajo de lo normal, debido al desarrollo progresivo del fenómeno climático El Niño.

Este evento causa estragos en los países sudamericanos con incidencia en el Pacífico, por la producción de intensas lluvias y descomunales inundaciones; pero en el Atlántico se comporta de una manera distinta, reduce el número de ciclones tropicales por el descenso en la humedad y en la intensidad de los vientos.

Esa es la buena noticia de la serie titulada: "Los huracanes al acecho", que estará en los hogares dominicanos durante los próximos seis meses.

Algo de broma viene bien antes de continuar con los capítulos no tan alentadores para la República Dominicana de la presente edición ciclónica del 2014.

Los números ya están a la mano. William Gray, junto a Philip Klotzbach, de la Universidad de Colorado de EE.UU., señalan que este año se formarán 9 tormentas, 3 huracanes y uno de gran intensidad; mientras que el Centro Nacional de Huracanes de Miami, voz autorizada en todas las temporadas ciclónicas, afirma que tendremos entre 8 y 13 tormentas tropicales, de las cuales entre 3 y 6 se convertirían en huracanes y entre 1 o 2 alcanzarán o superarán la categoría tres en la Escala de Saffir-Simpson.

Ambas entidades concuerdan en la influencia del fenómeno climático El Niño en la región atlántica, incluyendo nuestra zona caribeña, para que este año tengamos menos sistemas tropicales (lo normal para una temporada ciclónica es de 12 tormentas, 6 huracanes y 3 ciclones intensos).

Entonces aquí viene la segunda parte de la saga: "El Niño y sus ciclones", un tanto desalentadora para los buenos ánimos.

Durante el desarrollo de otros fenómenos de El Niño, en el Pacífico Oriental, las temporadas de huracanes se tornaron peligrosas y amenazantes para el territorio nacional.

En los siguientes años que enumeraré hubo este tipo de evento climático: en 1951 dos huracanes pasaron cerca del país (Charlie de categoría 4 y Dog de categoría 3); en 1963 el huracán Edith, categoría 2 pasó sobre la isla, mientras otros dos se acercaron (Flora de Categoría 4 y Ginny de categoría 2); en 1982 el huracán Debby, de categoría 4, se formó cerca de la costa norte; en 1997, la tormenta Grace transitó al noreste de República Dominicana; y en el 2002, el huracán Isidore, categoría 3, pasó al sur del país.

Bajo las condiciones actuales en el Atlántico, la incidencia de El Niño en América del Sur y el aporte de aguas muy cálidas en el mar Caribe, para este año tendremos la amenaza de al menos dos tormentas tropicales y un huracán, sea que se acerquen a las costas dominicanas o que transiten sobre el país.

Los peligros están presentes todos los años, durante los seis meses de duración de cada temporada de huracanes, pues República Dominicana está en el mismo trayecto de los ciclones. Sin embargo, en los próximos meses la amenaza de ser afectado por estos eventos tropicales es mayor.

Y aquí entra en juego el Sistema de Emergencias 911. Con su entrada en funcionamiento, el pueblo dominicano tendrá la oportunidad de canalizar todas las incidencias y emergencias en una sola entidad. Pero el 911 no se basta solo. Decenas de organismos de protección civil, de seguridad, de salud, de orientación, serán el eje vertebral para su exitosa implementación.

Cada integrante de este novedoso sistema en el país deberá enfrentarse a dos consideraciones: comprender el peligro que representan las tormentas y los huracanes en la República Dominicana y saber qué hacer en el preciso momento que se presente una emergencia relativa a estos fenómenos atmosféricos.

El 911 no estaba en vigencia en 1998, con el huracán Georges, ni en 2007 con Noel y Olga, así que no hay forma de saber cómo será la respuesta de los equipos correspondientes bajo la directriz del Sistema de Emergencias.

La buena noticia es que disponemos de varios meses para preparar al personal técnico ante las eventualidades que nos traerá la temporada de huracanes, pues la actividad tropical intensa en el país va desde agosto hasta octubre.

Todas las instituciones, las empresas, el gobierno central, todo el ser viviente en esta isla, debemos apostar por tener capacitado y listo para actuar un Sistema de Emergencias que vele por la integridad y seguridad de la familia, aunque no tengamos que marcar las tres teclas del teléfono porque (pensemos de manera hipotética) los pronósticos se equivocaron.