Reelección

En períodos presidenciales de cuatro años, el tema de la reelección estará siempre presente, no sólo porque el período resulta corto para un buen plan de gobierno, sino porque a un líder que no puede continuar lo abandonan pronto.

Los períodos de cuatro años sin reelección tienen el problema de que los primeros dos años son de aprendizaje de las artes y artimañas del poder, y los dos últimos quedan arropados por la campaña política para el nuevo período.

Cuando existe la reelección consecutiva existe la tentación de usar los recursos del poder para continuar, pero como ha demostrado la experiencia histórica, esta circunstancia puede ser manejada con suficiente institucionalidad y compromiso de las élites con el sistema democrático.

En un sistema político sin reelección consecutiva, el Presidente siempre tendrá que jugar a dejar la puerta abierta para evitar la estampida de sus parciales. El sistema que adoptamos tiende a eternizar unos candidatos, y a la lucha sin cuartel contra éstos. En el diseño político todo tiene consecuencias.

Diario Libre