Raqueta y lance al aro

El dominicano de verdad, el que se eriza con el himno, siguió atento a Víctor Estrella en el US Open de tenis y a nuestro equipo en el Mundial de Básquet. No pocos pujaron cada raquetazo y lance al aro, porque somos una nación, repleta de problemas cotidianos y estructurales, pero con una cualidad inmensa: ama lo suyo. Y cuando le dan el chance, hace recordar que existe un alma nacional, bravía y sentimental, capaz de nuclear a un pueblo alrededor de eventos en apariencia ajenos a sus vicisitudes.

Nelson Rodríguez