Embajador del desarrollo

A veces un extranjero llega al país, y aúna sus esfuerzos con los nuestros en el camino hacia el progreso. Menos frecuente es que ese extranjero sea el representante de otra nación y dedique su gestión diplomática a promover iniciativas en beneficio de los dominicanos.

El embajador de Ecuador, Carlos López Damm, quien retornará próximamente a su país, es una de esas excepciones.

Durante su permanencia de cinco años en nuestro suelo no se limitó a desempeñar las funciones protocolares pertinentes a su cargo. Puso, además, todo su empeño a fin de poner en marcha programas dirigidos a mejorar nuestras condiciones de vida, transmitiendo experiencias, fomentando vínculos y auspiciando avances institucionales.

Serían necesarias varias columnas como ésta para citar con un mínimo de inclusión las numerosas iniciativas del embajador López Damm. Basta señalar su colaboración en áreas tan diversas como el servicio postal, modelo penitenciario, régimen electoral, protección de discapacitados, mecanismos de seguridad social, conservación de recursos, esquemas de licitaciones, intercambios universitarios y regulación de mercados.

En etapa de firma se encuentra un convenio de transporte aéreo, acorde con la triplicación que ha tenido lugar en el intercambio comercial entre ambas naciones, el cual facilitará también operaciones triangulares de traslado de productos a mercados de terceros países.

Ese convenio forma parte de un conjunto de 26 acuerdos bilaterales suscritos en los últimos cinco años, facilitados por la reactivación de la Comisión Mixta de Cooperación Domínico-Ecuatoriana, la cual sostuvo su cuarta reunión 17 años después de haber celebrado la tercera.

Afortunadamente la conclusión de su gestión no implicará el final de su colaboración. López Damm desempeñará funciones en la cancillería ecuatoriana que lo mantendrán muy vinculado con la zona geográfica a la que nuestro país pertenece.

gvolmar@diariolibre.com 

Gustavo Volmar