La Justicia

¡Qué dilema el de un juez cuando se enfrenta a un litigio que es más político que legal! Si complace a los políticos, se quema en lo legal. Si hace lo que ordena la ley, lo linchan los políticos. ¿Cuál es el deber del juez?

Cuando un asunto es decidido en la opinión pública antes que en los tribunales, el juez sabe que no puede ganar. Si es pusilánime, como Pilatos, se lava las manos, y entrega el condenado previamente por la multitud. Si es verdaderamente juez, cumple con su deber, aunque sea el primero en caer.

Estas consideraciones no defienden las decisiones tomadas el pasado viernes en dos sonados casos. Al igual que casi todos los dominicanos, no las hemos leído para poder evaluarlas a profundidad, aunque sí podemos apreciar los errores que se han cometido, unos condenándola y otros defendiéndola.

Lo que no hemos visto es un real compromiso con el valor de la justicia en una sociedad. La institución Justicia debe ser preservada, particularmente por los actores del sistema. Esa actitud es el peor de los fallos.

Diario Libre