Un pobrísimo reporte

Lo peor que tiene el reporte presentado por la Comisión de la Organización de Estados Americanos que visitó tanto a Haití como a la República Dominicana, es lo que deja de decir para acomodarlo a la visión ya expresada por el Secretario General de esa institución, Luis Almagro.

Es claro que el documento fue elaborado para no hacer quedar mal al funcionario luego de sus lamentables declaraciones de días pasados, magníficamente comentadas por nuestro colaborador Flavio Darío Espinal el pasado jueves.

El informe deja de reconocer todo lo bueno que se ha hecho en el registro civil de los extranjeros y que se le explicó muy bien al presidente de la comisión que, por demás, es experto en el tema.

Deja de reconocer que no existe crisis, sino un tema llevado por los cabellos por las autoridades haitianas a fines de ocultar su situación interna, y acomoda las conclusiones para proponer una mediación donde no hay conflicto.

Este traje a la medida para que el secretario Almagro se viera bien, y que recoge las pretensiones haitianas fue aceptado inmediatamente sin pudor alguno por nuestros vecinos. No se podía esperar otra cosa.

La posición dominicana expresada por el Canciller Navarro el mismo jueves es la correcta: no hay nada que hablar con quien nos ofende y mucho menos de temas de soberanía interna.

Pero el Gobierno no puede bajar la guardia pues la cosa va a seguir y los perjuicios continuarán. A un necio se le ignora, pero se le vigila.

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Adriano Miguel Tejada