Ciudad Gótica

Sr Presidente. La Ciudad de Santo Domingo, a pesar del crecimiento y desarrollo inmobiliario, sigue estando prácticamente oscuras. Con excepción de la avenida Bolívar y su extensión (la ruta del Presidente), y la recién remozada Núñez de Cáceres, las principales avenidas están a oscuras, incluso cuando en muchas de ellas hay lámparas de alumbrado público (apagadas o sin bombillo). Hay avenidas casi completas (como la Winston Churchill) que se alumbran parcialmente con la luz que “brota” desde las lámparas de los negocios privados. Es decir, que en materia de alumbrado público el Estado se ha recostado del sector privado.

Esta falta de alumbrado, junto al estado calamitoso de la mayoría de aceras, hacen que andar a pie en la ciudad sea todo una aventura. Se siguen construyendo hoteles de lujo, pero los turistas no pueden salir a caminando a explorar como en otras ciudades del Caribe. Es decir, que la ciudad se beneficia poco de ese Turismo, ya que en el mismo hotel le recomiendan no salir a pie de noche. La oscuridad en las calles es una de las características del subdesarrollo, y crea una pésima impresión a quienes habitan en esta ciudad, y a quienes la visitan. Le pido que, al menos comenzando con el polígono central, podamos tener el privilegio que usted tiene de conducir por avenidas debidamente iluminadas, y se empiece a cambiar la imagen de Ciudad Gótica. R. Batista

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