Intrigas e inquietudes...

El caso de Héctor intriga e inquieta, aun cuando parece no importar a sus viejos compañeros de partido los pasos ya dados o los siguientes por dar.

No hay que recordar que abandonó la campaña de Luis o que renunció del PRM, del que era vicepresidente, pero si conviene saber que actualmente se haya reflexionando sobre su futuro político inmediato.

Y que no lo hace solo.

Ahora es un pelotero sin uniforme, pero tiene guante, bate y pelota propios, y solo necesita un campo para entrar a juego y desempeñar cualquier posición, siendo como es un político de habilidades comprobadas.

Una especie de utility.

Su antigua condición de vocero debe proveerle importancia, y si no ascendiente, por lo menos cercanía con seguidores de Hipólito, a los cuales estaría visitando, en la capital y en el interior del país.

De esos intercambios dependerá todo, pero entre sus íntimos se da por seguro que ya en enero estará apoyando un candidato, que sin duda no será Luis.

¿En quién estuvo la falla, en Héctor, el aspirante, en Hipólito, el jefe político, o Luis, el candidato ?

Al parecer, este sería uno de los tantos capítulos que se le olvidaron a Cervantes.

Diario Libre