La culpa siempre es del sistema

Una vez se dio la noticia de que todas esas enfermedades que afectaban particularmente a los niños se habían eliminado. Que la mortalidad por esa razón se había llevado a cero.

El hecho se celebró como un triunfo de salud pública y del gobierno de entonces, y desde entonces, la vacunación de los recién nacidos se hizo obligatoria. Esto es, algo permanente y no operativo de circunstancia.

Sin embargo, tiempo después volvieron a aparecer casos, que no pudieron explicarse en la lógica de salud, puesto que se respetaban los protocolos.

La culpa, como hay que suponer, se le echó al mismo sistema de salud que había acabado con esos males.

Lo mismo sucede ahora con la justicia. Hace un tiempo se dio a entender que los inconvenientes del pasado, y que se denunciaban con frecuencia, se habían superado.

Nuevos códigos, y fiscales, y jueces, e instancias de supervisión, y con todas esas mejorías se arrancó de cero, pero sobre todo se arrancó bien.

Ahora se investigan, suspenden y someten jueces, como si la situación fuera peor que la de antes. Tampoco ahora se entiende el retroceso, y la culpa va directa al sistema.

Siempre al sistema.

Diario Libre