Partidos y libertad

Una reciente sentencia del Tribunal Constitucional español establece que “la libertad de expresión de los militantes de los partidos está limitada por su pertenencia a una organización en la que participan voluntariamente y a la que, por tanto, deben fidelidad”.

La reseña de la decisión la trae el diario El País en su edición del 4 de enero y señala que fue dictada en ocasión de un amparo solicitado por la socialista asturiana Susana Pérez-Alonso, que criticó la decisión de su partido, el PSOE, de no celebrar primarias en las elecciones municipales de Oviedo. El partido la suspendió por 20 meses y ella recurrió ante los tribunales.

Este precedente parece imposible de lograr en nuestro país dada la economía general del artículo 216 de la Constitución que regula la existencia de los partidos políticos, pues la disposición sustantiva señala que los partidos deben sujetarse “a los principios establecidos en esta Constitución”, “respetando el pluralismo político” y “sustentarse en el respeto a la democracia interna”.

La pena es que nuestros partidos no respetan la Constitución ni las leyes ni son democráticos.

Diario Libre