Análisis y método geopolítico: la cuenca del Artibonito

La geopolítica debe ser vista como un instrumento que permite sistematizar el análisis de un conflicto, ideología, o intereses en uno o varios espacios determinados. Esto se debe a que la geopolítica ofrece un método exclusivo que desentraña el comportamiento e intereses de actores envueltos en una situación específica, permitiendo a cualquier interlocutor un mayor margen de maniobra para la comprensión y formulación de objetivos en un área geográfica en particular.

Pero, ¿cuáles serían los pasos propios de este proceso? ¿De cuáles herramientas se nutre el método geopolítico? ¿Acaso se obtiene una síntesis “objetiva” al aplicar este método?

Para contestar, hemos recurrido al ejemplo de la cuenca del Artibonito, compartida entre Haití y Republica Dominicana y la principal cuenca hidrográfica del Caribe insular. Por su importancia, la misma debe ser integrada por cualquier analista, empresario o persona interesada en relaciones domínico-haitianas, el desarrollo fronterizo, o bien la protección del ecosistema nacional.

Ante todo, una primera exigencia para este tipo de análisis es el necesario y amplio conocimiento geográfico del área a analizar. Esto incluye una revisión de la cartografía activa e histórica del lugar, estudios sobre uso de suelos, y la identificación de conflictos por el uso de recursos entre comunidades locales o entre poblaciones haitianas y dominicanas.

La cuenca del Artibonito posee una superficie mayor a 9,000 kilómetros cuadrados (2,770 km2 ubicados en República Dominicana), tiene 6 sub-cuencas, 12 micro-cuencas, abarcando 21 ríos, tres cañadas y dos arroyos.

Del lado dominicano la cuenca engloba las provincias de Elías Pina, San Juan, Santiago Rodríguez, y Dajabón, mientras que del lado haitiano incluye los departamentos Artibonite y Centre principalmente.

Para Haití, las aguas provenientes de la cuenca son de una vital importancia, ya que de las mismas depende la presa de Peligre, cuya sedimentación avanza sin que ningún gobierno haitiano (a pesar de los desembolsos internacionales) emprenda acción alguna para contrariar esta situación.

Con la crisis de agua que afecta Haití y en particular las poblaciones fronterizas y el descalabro sociopolítico haitiano, consideramos que el análisis geopolítico está centrado en tres ejes fundamentales: gestión de recursos hídricos, protección de suelos y ecosistema, y la presión migratoria haitiana.

Cambios en los regímenes de lluvia y sequías prolongadas están poco a poco modificando la disponibilidad de recursos en toda la cuenca del Artibonito. Esto sin duda hace inevitable el surgimiento de conflictos entre comunidades vecinas y, peor aún, entre haitianos y dominicanos, que luchan por apropiarse y defender el uso de cualquier recurso considerado como propio.

Llegados a esta parte, y para cada etapa del análisis, procede cuestionarse: ¿Cuáles son los actores envueltos en la gestión hídrica de la zona? ¿Dónde y qué persigue cada uno? ¿Con cuáles aliados cuentan? En caso de haberse suscitado conflictos específicos, ¿Cuáles son las posibilidades de permanencia y resolución del mismo?

A modo de ejemplo, dado que el rio Artibonito penetra en Haití desde territorio dominicano, una investigación más profunda deberá examinar cómo las sequías recurrentes han afectado el manejo que hacen las comunidades dominicanas de las aguas que se insertan en territorio haitiano, y las consecuencias inherentes a dicha acción.

Con sólo un 3% de cobertura forestal, y con muy limitado acceso a energía eléctrica y GLP, los haitianos se ven cada vez más forzados de traspasar la frontera para obtener leña y carbón. Esto ya ha traído confrontaciones y ha incidido, junto con la carencia de GLP en la parte dominicana, en la creación de mafias que cuentan con la anuencia y apoyo de autoridades en ambos lados de la frontera.

De igual manera, la continuidad de la crisis sociopolítica haitiana ha contribuido a incrementar el éxodo masivo de haitianos hacia todo el Caribe y en especial hacia la parte dominicana del Artibonito. Debido a que la cuenca no posee recursos ilimitados, y vistos los cambios climáticos y topográficos mencionados, una incesante migración haitiana hacia esta área originará un contexto de suma inestabilidad en un territorio de tanta envergadura e interés.

Toda investigación geopolítica requiere la elaboración de una cartografía que muestre las rivalidades e intereses manifestándose en el espacio.

Esto último permitirá aclarar las disposiciones de los actores y desacuerdos presentes in situ, facilitando plantear soluciones a corto y largo plazo. No obstante, nuestro interés ha sido llamar la atención sobre la pertinencia y uso adecuado del método geopolítico.

Roberto Mallén Brea