Putrefacción y sueldos en la Policía

El pasado lunes ocurrieron en forma simultánea dos hechos que retratan lo que es la Policía: una marcha de familiares para que mejoren sus salarios, y la divulgación de un vídeo en el que se observa a agentes fusilando a dos supuestos delincuentes en la provincia Valverde. Hay que ponerse en el lugar de un policía, una autoridad con el poder que le da portar un arma de fuego, pero necesitado de lo elemental para vivir de manera decente, pero también hay que denunciar una estructura corrompida hasta el tuétano, donde el deterioro social y moral tocó fondo. Procede simpatizar con un buen sueldo para el policía; pero por más que gane, si no hay una transformación interna, en vez de confianza seguirá infundiendo temor.

Nelson Rodríguez