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Denuncia, investigación y ética periodística en “Spotlight”

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Denuncia, investigación y ética periodística en “Spotlight”
Tom McCarthy y Josh Singer reciben el Oscar por el mejor libreto original por “Spotlight”. (AP)

SANTO DOMINGO. Uno de los temas más candentes de los últimos años son las denuncias de abuso sexual a menores por miembros del clero de la iglesia católica. En distintas latitudes el cine ha asumido la denuncia y la controversia. Ya son varias las películas realizadas en torno a este tipo de escándalo. Los documentales “Líbranos del mal” (EE.UU. 2006) y “Cordero de Dios” (México 2010), así como las películas de ficción “Obediencia perfecta” (Chile 2014), “El Club” (Chile 2015), dan cuenta de una cruda realidad oculta quizás por siglos.

“Spotlight” trata el tema desde la perspectiva de la información noticiosa, proporcionando una mirada panorámica de la situación ocurrida en la ciudad de Boston en el año 2003, donde el periódico local logró demostrar que decenas de sacerdotes pederastas habían sido sistemáticamente protegidos por su iglesia. El filme acaba de conseguir los premios Oscar al Mejor guión original y Mejor película, lo que para muchos resultó ser una sorpresa.

Periodismo de investigación

Walter ‘Robby’ Robinson es un prestigioso y veterano periodista nacido y criado en Boston. Dirige una unidad de investigación en The Boston Globe llamada Spotlight, conformada por profesionales jóvenes que se toman muy en serio su trabajo. La llegada de un nuevo director del periódico permite a Walter y su equipo dar un giro a su trabajo; se requiere mayor lectoría y los temas de la comunidad han pasado a ser relevantes. Asumen el trabajo de investigar las denuncias de fieles católicos en distintas parroquias de la localidad.

Mike Rezendes (Mark Ruffalo), Matt Carroll (Brian d’Arcy James) y Sacha Pfeiffer (Rachel McAdams), son los periodistas encargados de seguir las pistas que proporcionan las víctimas, y poco a poco van conformando una historia de dimensiones insospechadas.

Los poderes fácticos

Pero el trabajo no es sencillo, los investigadores van encontrando obstáculos en todos los niveles, la policía, la fiscalía, los tribunales, los colegios, los abogados y otras instituciones de la ciudad están permeadas por el interés de ocultar pruebas y antecedentes. Walter Robinson tiene que vencer el bloqueo al más alto nivel para encontrar la brecha que permita romper el pacto de silencio.

El relato

Es un relato fluido y lineal que va dosificando la información como un filme de misterio y la va combinando con las distintas miradas de cada uno de los periodistas involucrados. En cierto sentido se llega a sacrificar el protagonismo de Walter, en función de una historia más abierta y con diferentes voces; del otro lado, cada personaje secundario cuenta con muchas escenas individuales y con sus pares, en las cuales el trabajo se va cruzando con sus vidas como católicos de formación.

También son importantes los personajes de tercer orden, en especial los abogados involucrados en el caso, ya que permiten ver otra faceta, regularmente oculta en este tipo de situaciones. Destacan en sus respectivos roles los estadounidenses Michael Keaton y Mark Ruffalo. El trabajo de dirección de Tom McCarthy es sólido, con la cuota exacta de heroísmo y emotividad.

El rol de la prensa

Es importante aclarar que la historia se centra en la dimensión interna del trabajo periodístico. Las tensiones e intereses, a veces encontrados, dan cuenta de la complejidad que los temas polémicos generan en cualquier medio de comunicación. Lo pertinente, lo oportuno, las fuentes, las voces, las miradas, todo pesa al momento de tomar decisiones editoriales. Los personajes protagonistas son conscientes además que tienen en sus manos la historia de sus vidas que podría significar un cambio social relevante y eso también ejerce presión. Se asume además una cierta cuota de mea culpa de la prensa, ya que si bien se estaba al tanto de las denuncias no se había dado seguimiento a las mismas.

El mensaje, tanto de la película como de la Academia de Artes Cinematográficas al premiarla es claro: la prensa fiel a su ética es fundamental para una sociedad más sana y más justa. Recomendable para personas vinculadas a los medios de comunicación, para aspirantes a guionistas y para quienes disfrutan con películas de denuncia.

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