Familias desalojadas reclaman terrenos en Santiago

SANTIAGO. Decenas de familias que fueron desalojadas de cientos de tareas de tierra para ser utilizadas en la construcción del Jardín Botánico en el 2005 aquí, se mantienen ocupando varios solares reclamando del Gobierno su inmediata reubicación.

Agapito Santos, Juan Collado, Isabel Gómez y Elido Gómez declararon que se mantendrán en los terrenos ubicados en las tres cruces de Jacagua, detrás del Jardín Botánico, hasta que se les entreguen las tierras para construir sus viviendas o se les asignen apartamentos de los que construye el Estado.

“Aquí llevamos 23 días y no vamos a abandonar esta lucha, porque somos 500 familias, más de mil 600 personas, las que venimos padeciendo todo tipo de abusos y agresiones por parte del Gobierno”, expresó Isabel Gómez.

Mientras que Agapito Santos, secretario general de la junta de vecinos Amor y Vivir, de la urbanización los Reyes tercero, declaró que solo cuando les entreguen las tierras para sus viviendas o apartamentos del Gobierno, abandonarán el lugar.

Dijo que la junta de vecinos ha sido notificada para que se presente al Ministerio Público el próximo día 11 de septiembre, pero que primero se reunirán en el Palacio Nacional, con algunos funcionarios para buscarle solución al problema.

Los dirigentes comunitarios acusan a una empresa privada de tratar de apropiarse de unas 400 tareas de tierra que están ubicadas en la parte trasera del Jardín Botánico y dejarlos sin espacios para construir sus casas.

Refirieron que en el 2007 el presidente Leonel Fernández asignó esos terrenos a la junta de vecinos Amor y Vivir y/o Jesús Cabrera, para beneficiar a las familias que iban a ser desalojadas por la construcción del Jardín Botánico.

María Altagracia Santos, quien cocina en un campamento improvisado, declaró que las familias solo reclaman justicia.

Dijo que el presidente Danilo Medina al parecer no ha sido enterado del problema, ya que lo hubiera resuelto, porque es un mandatario que no permita injusticias contra los más pobres de la República Dominicana.

Narciso Pérez