Los conflictos más ácidos en la Cámara de Diputados en los últimos 20 años
Diario Libre
En los últimos 20 años de historia democrática, la República Dominicana ha tenido sus momentos de bajas en el Congreso Nacional, y particularmente en la Cámara de Diputados.
En los tiempos en los que el Congreso Nacional mantuvo una distribución de fuerzas políticas disputadas entre el PRD, PRSC y PLD la lucha por la presidencia de la Cámara de Diputados eran reales batallas de poder, amarres y gestiones políticas entre las tres fuerzas políticas.
Esto permitió que figuras como Héctor Peguero Méndez, Rafaela Alburquerque y Alfredo Pacheco se mantuvieran como presidentes del hemiciclo a pesar de que sus partidos no estuvieran en el poder.
Todo ha cambiado desde el año 2010. Desde entonces el PLD ha logrado mantener de forma holgada el control del Congreso, lo que le ha permitido imponer sus presidentes y navegar, sin inconvenientes mayores. Hasta ahora.
De hecho, durante las reformas a la Constitución de 2010 y 2016 los diputados peledeístas no habían roto la disciplina del partido que tanto defiende el PLD y que se ha desvanecido en la lucha de poder entre el presidente de la República, Danilo Medina, y el presidente del PLD, Leonel Fernández.
Se cambiaron los reglamentos internos con un tufo a reelección en 1998
El escenario estaba preparado para el conflicto. Siendo Héctor Rafael Peguero Méndez un diputado perredeísta que se impuso en la Cámara de Diputados con el apoyo del gobernante PLD, por encima de la propuesta del PRD, que había llevado a Winston Arnaud.
Peguero Méndez no era bien visto desde entonces entre sus iguales. El 5 de agosto de 1998 los diputados del PRD arrebataron dos micrófonos al presidente Héctor Rafael Peguero Méndez y desconectaron e incautaron la fuente que alimentaba el sistema de sonido en rechazo de la aprobación de la modificación del reglamento interno de la Cámara de Diputados.
¿Cómo se aprobaron los reglamentos? A pesar de que en ese momento solo se contaba con 61 diputados, se aprovechó la incursión de varios diputados del PRD, que supuestamente incrementaban a 80 el quórum para aprobar la pieza.
Tras este mecanismo tan dudoso, el edificio del Congreso Nacional se mantuvo rodeado por agentes de la Policía Nacional. La crisis generada permitió que la diputada Rafaela Alburquerque (PRSC) dirigiera la presidencia de la Cámara de Diputados: “para mantener la gobernabilidad y el equilibrio”, dijo el líder de entonces Hatuey De Camps.
En la oposición imperaba el temor a una modificación en la Constitución que permitiera la reelección de Leonel Fernández, pues a la fecha imperaba el modelo de la reelección no consecutiva.
Cuando los diputados dejaron de sesionar por conflicto en la JCE...
El conflicto generado por la elección de los miembros de la Junta Central Electoral provocó que los legisladores reformistas y peledeístas de la época abandonaran el hemiciclo de manera indefinida. Los diputados duraron sin sesionar desde el 8 de octubre hasta el 12 de noviembre de 2002. En ese período se incrementaron las medidas de seguridad en el hemiciclo por el temor de que diputados y sus empleados entraran armados.
Cuando dispararon dentro del hemiciclo
El 16 de agosto de 2003 , durante la elección del bufete directivo de la Cámara de Diputados, que encabezaba Alfredo Pacheco (PRD), se produjo un sabotaje al sistema eléctrico que dejó a oscuras parte del edificio del Congreso Nacional, mientras en la sala de sesiones se produjeron disparos y un hubo empujones, patadas y trompadas entre los legisladores de distintos partidos. A pesar del intento de boicot nunca se dio con quiénes lo tramaron.
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