Los peloteros dominicanos con potencial de ser trabucos que encabezan a los novatos de 2019
AP
Lazos familiares con peloteros, bates para temer y brazos poderosos caracterizan a los principales prospectos de este año, quienes están a un paso del estrellato en las Grandes Ligas.
A continuación, un vistazo a la nueva ola de talentos jóvenes:
Vladimir Guerrero Jr., pelotero del cuadro, Toronto. Considerado por muchos como el prospecto principal de las Mayores, Guerrero se perderá el inicio de la temporada tras sufrir un tirón en el músculo oblicuo derecho durante la pretemporada. Es hijo del dominicano Vladimir Guerrero, miembro del Salón de la Fama, y podría llegar directamente a las Mayores una vez que esté saludable. Bateó para .381 con 20 jonrones y 78 producidas el año pasado, durante cuatro escalas en las menores.
Eloy Jiménez, jardinero dominicano, Medias Blancas de Chicago. Aunque Chicago perdió la puja por los servicios de Manny Machado en el mercado de agentes libres, podría programar el debut de Jiménez y de su eficaz bateo en abril. A sus 22 años, Jiménez bateó para .317 con 10 jonrones y 42 impulsadas la temporada anterior, con la sucursal de la Doble A en Birmingham. Fue ascendido a Charlotte, de la Triple A y lució ahí incluso mejor, con un promedio de .355, 12 cuadrangulares y 33 impulsadas en 55 duelos. Enfrentó dificultades en la pretemporada y se le envió de vuelta a sucursales, pero pronto podría estar en las mayores.
Fernando Tatis Jr., campocorto dominicano, San Diego. A sus 20 años, Tatis tiene tanto potencial que Manny Machado accedió a jugar en la antesala con San Diego, a fin de abrir espacio a la llegada del campocorto. Su padre homónimo jugó en las mayores de 1997 a 2010. El hijo fue adquirido en 2016, mediante un canje que envió a James Shields a los Medias Blancas. Bateó para .286 con 16 vuelacercas y 43 empujadas por San Antonio, en la campaña pasada de la Doble A.
Víctor Robles, jardinero dominicano, Washington: El acuerdo colosal mediante el que Bryce Harper se marchó a Filadelfia abrió una vacante en los jardines de los Nacionales, que bien podría ser ocupada por el talentoso Robles, quien bateó para .288 con tres cuadrangulares y 10 impulsadas en 21 encuentros con Washington, la temporada anterior.
Jesús Luzardo, lanzador zurdo, Oakland. Nacido en Perú de padres venezolanos, Luzardo tiene 22 años y una recta tremenda. Esgrimió argumentos para integrar la rotación de Oakland en la pretemporada. Tuvo una foja de 10-5 con una efectividad de 2.88 en tres estadías dentro de las menores el año pasado. Terminó con 129 ponches en 109 innings y un tercio.
Alex Verdugo, jardinero mexicano-estadounidense, Dodgers de Los Ángeles. El pelotero de 22 años jugó por Los Ángeles en cada uno de los dos años anteriores, pero busca regularidad con los talentosos Dodgers. Este año podría deparar su despunte, tras batear para .329 con 10 jonrones y 44 empujadas en 91 juegos con la sucursal de la Triple A en Oklahoma City.
Yusei Kikuchi, lanzador zurdo japonés, Seattle. Sigue los pasos de Ichiro Suzuki, uno de los ídolos de su niñez. Formalizó en enero un contrato por cuatro años con Seattle, que le garantiza 56 millones de dólares y que incluye opciones del club que podrían llevarlo a 109 millones durante siete temporadas. El pitcher de 27 años tuvo un récord de 14-4 y una efectividad de 3.08 por los Lions de Seibu, el año pasado.
Nick Senzel, pelotero de cuadro y jardinero, Cincinnati: De 23 años, Senzel tuvo oportunidad en el jardín central durante esta pretemporada, después de que los Rojos dejaron ir a Billy Hamilton en el invierno. En las menores, se desempeñó principalmente en la intermedia y la antesala, pero es más conocido por su bate. Ostentó un promedio de .310 con 25 remolcadas en 44 juegos con la sucursal de la Triple A en Louisville, en 2018.
Forrest Whitley, lanzador derecho, y Kyle Tucker, jardinero, Houston. Whitley deslumbró en la Liga Otoñal de Arizona, con una efectividad de 2.42 en seis aperturas y con 36 ponches en 26 entradas. Tucker, de 22 años, tuvo dificultades en su primera incursión dentro de las mayores el año pasado. Bateó para .141 en 28 juegos, pero llegó a .332 con Fresno en la Triple A. Whitley y Tucker comenzarán el año en las menores pero podrían ayudar a Houston en la lucha por el cetro del Oeste de la Americana en el verano.
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