El último juego de Ted Williams

Teodoro Samuel Williams (Ted) como un gurú de la pesca, entendió y practicó que la paciencia es un don divino para atrapar grandes presas, ya sea con la vara, ya sea golpeando con el bate.

A Ted Williams lo recuerdo cuando participó en un torneo del Marlin Blanco y en compañía de Max Alvarez y Félix Mario Aguiar lo saludamos en Cabeza de Toro.

Debutó en las Grandes Ligas el 20 de abril de 1939 con los Medias Rojas de Boston. Fue un estudioso del arte del bateo y logró combinar buenos promedios ofensivos y poder al bate, fue un bateador de técnica muy elaborada dentro del cajón de bateo con un swing perfecto, grandes reflejos y gran paciencia

El 25 de septiembre de 1960, en su última aparición en el pentágono en su carrera, contra Jack Fisher, de los Orioles de Baltimore, Ted Williams, de los Medias Rojas, bateó una línea salvaje en conteo de 1-1 y la hizo viajar 450 pies hasta los asientos atrás del bullpén en el Fenway Park de Boston. Fue el jonrón 521 y último de la carrera. El batazo dio a los Medias Rojas victoria de 5x4.

Williams permaneció en el dógaut ignorando los aplausos de la multitud, pero cuando trotó para tomar su lugar en el jardín izquierdo en el noveno episodio, fue reemplazado inmediatamente por Carroll Hardy. Se retiró, mientras una multitud puesta de pie lo aclamó ante su indiferencia.

“The Splendid Splinter” siempre jugó con el deseo de ser recordado como “el mejor bateador que ha vivido”, algo que para muchos fanáticos logró. En 1970 escribió un libro sobre el tema, “The Science of Hitting” (La Ciencia del Bateo), publicado en 1986 y tras su retiro de los diamantes practicó, y escribió libros acerca de la pesca.

Falleció a los 83 años de edad, el 5 de julio de 2002 en Crystal River, Florida.

Un día como hoy: 1993, José Rijo, de los Rojos de Cincinnati, blanqueó 6x0 a los Rockies de Colorado donde permitió un solo hit de Charlie Hayes en la segunda entrada.

1997, Pedro Martínez (El Orgullo de Manoguayabo) se unió a Curt Schilling, de los Filis de Filadelfia, en el club de los 300 ponches en una temporada. El derecho de los Expos de Montreal abanicó a nueve rivales de los Marlines de Florida, al ganar 3x2 para convertirse en el primer lanzador en un cuarto de siglo con 300 ponches y efectividad debajo de 2.00. (Martínez terminó con marca de 1.90 de efectividad, la mejor de la Liga Nacional). La última vez que dos lanzadores abanicaron a 300 ó más bateadores en una temporada, fue 1972 cuando Steve Carlton y Nolan Ryan lograron la proeza. Martínez se convirtió en el lanzador 14 de la historia con esa cifra.

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