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Pie, entre Veracruz y la Ley de Naturalización

La gran promesa del taekwondo es nieto de haitianos que llegaron al país a trabajar en la caña

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Pie, entre Veracruz y la Ley de Naturalización
Luisito Pie

SANTO DOMINGO. Al igual que Luguelín Santos, Luisito Pie es de un barrio pobre de Bayaguana. Es un producto del Centro de Iniciación Deportiva Escolar (CIDE), y la profesora de educación física Francisca "Quica" Tiburcio también fue su mentora. Quería ser fondista, es lo que físicamente parece, pero en 2010, el taekwondo lo conquistó, y allí parece augurarle un gran futuro.

Pie, de 20 años, emerge como serio candidato para heredar la plaza de Gabriel Mercedes (58 kilos) en el equipo nacional. Pero, además de esa lucha en el tapiz, tendría otra burocrática, ya que tiene el perfil para someterse al Proyecto de Ley de Naturalización Especial que el Gobierno debe enviar al Congreso en los próximos días.

Su madre (Marisol Pie) y su padre biológico (Josué Beltrán) son hijos de haitianos que llegaron a Monte Plata a trabajar en la industria de la caña de azúcar, y establecieron raíces en la comunidad Las Flores.

"Mi mamá es hija de haitianos, pero nacida aquí. "¿Mi papá? ¿Cómo le digo? Mi papá… Sí es haitiano, Josué Beltrán, pero no lo conozco", dijo Pie, que creció con su progenitora y su padrastro, Euclides Reyes.

Luisito, que nació en el hospital de Guerra el cuatro de marzo de 1994, domina un creole haitiano básico, y nunca ha tenido problemas con su documentación. Pero no está ajeno al proceso que podría tener que enfrentar, y le preocupa.

De momento, en integrar el equipo dominicano que irá a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz, y allí conseguir una medalla están invertidas todas sus energías.

"Mi sueño es que venga el ascenso (militar) por los méritos. Cada vez que entro al pabellón a entrenar pienso en mi familia, porque soy pobre, trato de subir y no ser un segundo", dijo Pie, cuyos ingresos de RD$7 mil al mes, como "nuevo valor" (Deportes) y marinero (Armada), no le permiten ayudar a su familia como desea.

Su jornada comienza a las 5:00 de la mañana cuando abandona la Villa Olímpica de Las Américas para entrenar dos horas en el Centro Olímpico. A las 4:00 de la tarde regresa a otra jornada similar. Una rutina que repite entre lunes y sábados. Sus dos victorias sobre Mercedes este año no hicieron más que confirmar su ascenso que comenzó en 2012 con el oro en un Abierto en México y la plata en los Juegos Bolivarianos de Perú.

NPerez@diariolibre.com