Contracción cuantitativa

El impacto que tendrá sobre la economía dominicana el alza de los tipos de interés en el mercado financiero internacional dependerá de otros factores concomitantes, como será el precio de los combustibles, la fortaleza del turismo y las oportunidades para invertir en nuestro sector exportador, pero es de presumir que afectará al costo del crédito y elevará el umbral de rentabilidad mínima requerida para nuevos proyectos. La Fed, el banco central de los EE.UU., llevó a cabo este mes el segundo incremento a su tasa de referencia en el presente año, pero en un rango del 1% al 1.25% continúa siendo muy baja, menor incluso que la tasa anualizada de inflación en los EE.UU., una anomalía consecuencia de la política de apuntalar los índices de precio de las acciones a expensas del funcionamiento de la tasa de interés como guía para la asignación de recursos.

El mercado financiero anticipa que habrá un calendario prolongado para la normalización de los tipos, convicción que ha moderado las reacciones adversas. De hecho, la decisión más temida no es tanto la de elevar la tasa de referencia, medida que incide sobre el costo del dinero, sino la de reducir el acervo de valores acumulado por la Fed por su programa de expansión monetaria.

Esto último incidiría directamente sobre la cantidad de dinero en circulación, con un impacto potencialmente más intenso que el de las variaciones de la tasa, diferencia que precisamente fue la razón por la que el programa se aplicó, cuando la disminución de la tasa demostró su ineficiencia para reactivar la economía.

El balance de activos acumulado por la Fed asciende a US$4,500,000 millones. Planea reducirlo en US$10,000 millones mensuales, lo que a ese ritmo requeriría que transcurrieran casi treinta años para que llegara a los US$1,100,000 millones que tenía cuando comenzó el programa. Pero también podría acelerarlo, a US$50,000 millones por mes, según las circunstancias.

Gustavo Volmar