Disputas demográficas

Afinales de los 50 el Gobierno dominicano publicó cifras abultadas de la población nacional para exagerar la importancia del país en la zona del Caribe. Hoy en día se han detectado casos de sobreestimación en zonas del continente africano, con el fin de obtener más donaciones de organismos internacionales y estados extranjeros. Y por igual, se alega manipulación en las cifras de refugiados acogidos por países como Turquía, Líbano y Jordania, con el propósito de recabar una mayor asistencia humanitaria. Pero un caso peculiar de disputa demográfica, cuyos fundamentos no son económicos, tiene lugar en Israel respecto de la población palestina.

En un régimen dictatorial es posible que una minoría pueda detentar el poder de forma indefinida, pero eso es más difícil en una democracia donde cada ciudadano tiene un voto. Si las zonas ocupadas de Gaza y la ribera oriental del río Jordán fuesen incorporadas a Israel y los palestinos residentes allá adquirieran el derecho al voto, la subsistencia del estado israelí podría verse amenazada. Y no haría falta que regresaran los palestinos que han emigrado a países vecinos, a los cuales Israel no va a permitir que retornen. Con los que ya están podría ser suficiente para que los palestinos se acercaran a ser mayoría.

Del total de 8.5 millones de la población del país, cifra que no incluye las zonas ocupadas, 1.8 millones son palestinos, lo que deja el número de israelíes en 6.7 millones. Si a esos 1.8 millones se suman los millones que fuentes israelíes calculan que viven en Gaza (2.0) y en la ribera oriental (2.7), el total de palestinos sería de 6.5 millones. Los palestinos, sin embargo, dicen ser ya 6.8 millones, superando a los israelíes.

Los israelíes más fervientes procrean muchos hijos y defienden la anexión de los territorios ocupados como un derecho histórico, mientras otros se inclinan por la solución de dos estados separados para preservar la identidad nacional.

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Gustavo Volmar