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Propensión al desastre

Según algunos informes, Latinoamérica tiene un problema catastrófico, o, mejor dicho, un problema de catástrofes

En varios momentos durante los últimos cien años se ha dicho que países en Latinoamérica están a punto de dar el salto para unirse al club de las naciones desarrolladas. Y una y otra vez esos vaticinios optimistas han fallado. Argentina tuvo esa oportunidad a mediados del siglo pasado, México unas décadas después, Venezuela en los 1970’s, Chile al final de la dictadura, Brasil recientemente, y otros en diversos grados y ocasiones, pero por una u otra razón las expectativas se desinflaron.

Se ha escrito mucho sobre las causas de ese perjudicial vaivén en las perspectivas de la región, ofreciéndose explicaciones que abarcan desde la herencia cultural recibida de españoles y portugueses, a la influencia de compañías transnacionales, deficiencias educativas, desigualdades sociales, la explotación colonial sufrida, o la desidia y corrupción de los regímenes políticos. Pero una causa adicional es también mencionada.

Según algunos informes, Latinoamérica tiene un problema catastrófico, o, mejor dicho, un problema de catástrofes. Se cita su exposición a terremotos, como los ocurridos en los últimos años en Chile, Haití y Ecuador. Se añaden a ellos los volcanes de Sur y Centroamérica. Súmense además los efectos del Niño, que afecta a la región con sequías o inundaciones más que a otras zonas del mundo. Y encima de todo lo anterior están los huracanes, tanto los del Pacífico Este como los del Atlántico y el Caribe.

De los veinte países cuyas economías están más expuestas a desastres naturales, el Banco Mundial sitúa nueve en Latinoamérica, a un costo anual promedio que excede los dos mil millones de dólares. Pero ese costo no depende sólo de la intensidad o frecuencia de los desastres, también abundantes en Asia y el Oriente Medio, sino de características particulares de nuestra región, como el grado de urbanización, la falta de prevención y la escasa efectividad de los mecanismos de emergencia.