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Segundo capítulo

La campaña en los EE.UU. contra los acuerdos de libre comercio pone de relieve la

pérdida de los empleos que han ido a parar a México y otros lugares

En la economía algunas cosas son más visibles que otras, y por serlo pueden convertirse en blanco de ataques. Es como si se tratara de un libro con dos capítulos, en el que el primero presenta una parte del cuento y el segundo la otra. Si sólo se lee el primero, no se tendrá la visión completa de su contenido.

La campaña en los EE.UU contra los acuerdos de libre comercio pone de relieve la pérdida de los empleos que han ido a parar a México y otros lugares. Trump ha prometido corregir esa situación dejando sin materializar la iniciativa del acuerdo transpacífico y el convenio que se ha estado negociando con Europa. Y en cuanto al Nafta, el acuerdo vigente con México y Canadá, ha expresado que lo renegociará a fin de impedir que las industrias sigan saliendo de los EE.UU., o en su defecto lo denunciará e impondrá aranceles punitivos compensatorios.

Es importante observar que la posibilidad de amenazar con los aranceles se debe a que la producción de esas empresas se destina al mercado estadounidense. Es decir, si esos productos fueran a Japón, China, Australia u otros países, no les afectaría que los EE.UU. les aplicaran un arancel pues no sería allá donde son vendidos. Es, por lo tanto, la capacidad de compra de los EE.UU. la que hace a esas empresas, muchas de ellas ubicadas en México, vulnerables a medidas en su contra.

Eso nos lleva al segundo capítulo del libro, donde se expondría la paradoja de que los EE.UU. poseen ese inmenso poder adquisitivo a pesar de tener un enorme déficit comercial con el extranjero. Ahí quedaría revelado que son los propios extranjeros quienes prestan a los EE.UU. el dinero para que puedan comprar esos productos. Lo hacen reteniendo miles de millones de billetes de dólares e invirtiendo millones de millones en acciones, bonos, fondos, inmuebles y otros activos.

La salida de empleos de los EE.UU. tiene como contraparte la salida de capitales de nuestros países.