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El arte urbano llega a Santo Domingo

SANTO DOMINGO. El proyecto "De mi barrio a tu barrio", dirigido por el pintor alemán Jim Avignon, generó murales de gran formato en sitios notables de espacios públicos de siete capitales de Centroamérica y el Caribe. Un libro editado en Alemania recogerá las obras de tan singular recorrido.

El proyecto "De mi barrio a tu barrio", que  recorrió diferentes países de Centroamérica y el Caribe, dejó en Santo Domingo una hermosa huella: un mural en el Monumento a Fray Antón de Montesinos, en el Malecón, donde participaron 9 jóvenes artistas dominicanos, liderados por el pintor alemán Jim Avignon.

Este proyecto regional de acercamiento cultural que utiliza el arte callejero como medio, fue dirigido por el Goethe-Institut Mexiko, institución cultural de la República Federal de Alemania cuyo misión es contribuir a fomentar el conocimiento de la lengua y cultura alemanas en otras regiones del mundo así como colaborar con el desarrollo de la cultura en general.

La institución considera la cultura y el arte como impulso y motor para la integración de los países y la participación ciudadana. En la región trabaja por medio de una red de socios, representando diez países centroamericanos y caribeños.


La gira se llevó a cabo entre febrero y marzo, y además de la República Dominicana incluyó a Jamaica, Costa Rica, Panamá, Guatemala, Nicaragua y Trinidad y Tobago, países donde se crearon obras murales en espacios urbanos importantes, con la participación de artistas locales que contaron con una semana para dar por terminada la obra.

Los pintores dominicanos escogidos para para el proyecto fueron Ángel Urelly, Luis Hidalgo, Ana de León, Gregori Moya, Citlally Miranda, José Ramia, Carlos Estrada y Patricia Grassals, quienes previamente habían participado en una competencia para este fin.

Jim Avignon, quien ha ganado fama por lograr crear obras de arte urbano de gran formato en muy poco tiempo, logra con los equipos locales donde trabaja fomentar el intercambio de ideas y técnicas. En Santo Domingo, el pintor alemán y su equipo trabajaron del 12 al 16 de este mes de marzo, y concluyeron con una fiesta de cierre, donde fueron invitados todos los ciudadanos para que disfrutaran del mural.

Pero también, durante el tiempo que duró el proceso de creación. el público pudo asistir al monumento dedicado a Fray Antón de Montesinos y verlos en plena acción mientras daban forma al mural.

Avignon, artista de acción autodidacta, como preludio y preparación para el recorrido por Centroamérica y el Caribe, a finales del año pasado participó en un proyecto único que consistió en la transformación de un muro 60 metros de extensión, ubicado en el barrio de Brooklyn, en Nueva York, en una obra de arte urbano gigantesca.



LOS PARTICIPANTES

Desde fines de noviembre de 2011 hasta el 6 de febrero de este año estuvo en marcha el concurso internacional dirigido a artistas urbanos, pintores, diseñadores de cómics y estudiantes de arte. Los participantes más destacados para las acciones artísticas fueron los seleccionados.

Los diseños se utilizaron en los países participantes en forma de paste-ups, copias blanco y negro de gran formato, de modo que todos los murales exhiben un carácter internacional.

Un libro a acerca de la gira tratará de los lugares visitados así como de los artistas participantes y sus trabajos. Será presentado como el inicio de una exposición multimedia sobre el proyecto del 27 de julio al 17 de agosto de 2012 en la Galería Neurotitan de Berlín.

El Monumento Fray Antonio de Montesinos, situado en el Malecón capitalino, donado por la República de México en homenaje al sacerdote jesuita defensor de los indígenas, fue escogido para realizar la obra por la Embajada de la República Federal de Alemania en el país, el Ministerio de Cultura, a través de la Dirección Nacional de Patrimonio Monumental, el Centro Domincio-Alemán y la promotora cultural María del Carmen Ossaye.

Este espacio se escogió, luego de ponderar otros lugares, por su significación histórica, por ser un espacio de movimiento turístico, así como por estar dentro de la Ciudad Colonial y frente al Mar Caribe, que le sirve como marco a la obra.