Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Actualidad

Estudio de tasas de tentativas y suicidios

Estudio de tasas de tentativas y suicidios según regiones sanitarias de salud 1984-1988 y 2007-2011, y tasas específicas de suicidios según grupos de edad y ciclo vital.  

Es muy frecuente entre los médicos psiquiatras enfrentarse a la compleja realidad de un conjunto de pacientes con ideas suicidas, o que han intentado suicidarse y otros que se suicidarán mientras están siendo tratados, y más aún, vivir la dura realidad de que ya se le han suicidado pacientes.

Las ideas e intentos de suicidio, no son diagnósticos. El suicidio que en sentido estricto implica muerte, de considerarse diagnóstico, lo sería de cierre, muerto el paciente, todo está consumado, se cierra el expediente. Tampoco existen personalidades suicidas, lo que existe es un conjunto de conductas suicidas producidas en múltiples situaciones existenciales y/o patológicas; aunque el acto suicida en sí mismo no es una patología.

Como se han producido cambios en la Regiones Sanitarias de Salud, pasaremos a mencionar las provincias que forman cada región. Región O: Distrito Nacional. Región I: Peravia, San Cristóbal y Monte Plata. Región II: Santiago, La Vega, Monseñor Nouel, Espaillat y Puerto Plata. Región III: Duarte. María Trinidad Sánchez, Sánchez Ramírez, Samaná y Salcedo. Región IV: Barahona, Bahoruco, Pedernales e Independencia. Región V: San Pedro de Macorís, Hato Mayor, El Seibo, La Romana y La Altagracia. Región VI: San Juan, Elías Piña y Azua. Región VII: Valverde, Monte Cristi, Dajabón y Santiago Rodríguez.

En el cuadro 1, dentro de las tentativas suicidas, es relevante la tasa de la Región II con 3.78, donde el aporte de Santiago y Espaillat es determinante; y la Región VII con 2.76 donde es fundamental el aporte de Monte Cristi. En los suicidios la tasa mayor es para la Región V con tasa de 5.59 donde son determinantes La Altagracia y El Seibo. También las tres regiones implicadas son las que mayores tasas totales poseen: Región II con tasa de 8.04, Región V con tasa de 7.22, y Región VII con tasa 7.66.

Dentro de las personas que se suicidan existe un predominio de factores de riesgo en los trastornos psiquiátricos, en los cuales priman los trastornos afectivos y dentro de estos predomina el depresivo. También las esquizofrenias, el alcoholismo, trastorno de la personalidad, entre otros. Además, el acto suicida se produce en enfermedades no psiquiátricas, sobre todo en las denominadas catastróficas.

En el cuadro 2, es necesario señalar las modificaciones, que se han producido en las Regiones Sanitarias O, I y III.

Actualmente la Región O está formada por el Distrito Nacional, Santo Domingo y Monte Plata. La Región I está integrada por Peravia, San Cristóbal y San José de Ocoa, y en la Región III a la provincia Salcedo se le cambió el nombre por el de Hermanas Mirabal. Aquí, tenemos que en los suicidios femeninos la tasa inferior está en la Región VI con I.II y la más elevada en la Región VII con 2.67. En los suicidios masculinos las tasas son significativas en todas las regiones y van de 8 a 12; la Región IV posee la tasa menor con 8.01; hay tasa importante en la Región III con 10.51; las tasas mayores están en la Región II y VII con 12.37 y 12.67, respectivamente.

En el cuadro 3, llama la atención el hecho de que el grupo de 5-9 años tiene 12 casos, lo cual es muy representativo. ¿Es posible que algunos de estos casos no hayan sido auténticos suicidios? ¿Accidentes, homicidios? Las autoridades sobre todo policiales que entran en contacto con el escenario del hecho son las que establecen la causalidad de la muerte, y hay casos confusos a estas edades. Aun así, las tasas no llegan a uno por cien mil, apenas son tasas de 0.14 para el sexo femenino y 0.42 para el masculino. El grupo 10-14 que enlaza la niñez con la adolescencia temprana ya empieza a tener tasas representativas de 0.96, es decir, uno, y 2.31. Ya de 15-19 años, es decir, adolescencia mediana y tardía se duplican las tasas con 1.91 y 4.67. Luego se produce un despegue cuantitativo en el grupo de 20-24 años con el inicio del periodo adulto joven con tasas de 3.38 y 11.30.

En el cuadro 4, que contiene los suicidios según períodos del ciclo vital, la tasa femenina en la adolescencia temprana empieza a subir a 0.96, es decir 1, luego sube en la adolescencia mediana y tardía a 1.91, que es igual a 2; en el adulto joven y la edad madura se mantiene en 2, con 2.46 y 2.32; y cae en la vejez a uno, con 1.19. En el sexo masculino en cambio hay un ascenso continuo y las tasas van desde 0.42 en la niñez hasta 17.46 en la vejez.

Se mantiene el hecho de que las tasas del acto suicida - en este caso sólo la mortalidad por suicidio - son constantemente ascendentes según ascienden los períodos del ciclo vital.