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Iglesia Católica califica hechos criminales y de violencia como una pesadilla diabólica

Arzobispado de Santiago se pregunta qué está pasando en la sociedad

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Iglesia Católica califica hechos criminales y de violencia como una pesadilla diabólica

SANTIAGO. El Arzobispado de esta ciudad mostró su preocupación por los hechos de criminalidad y violencia ocurridos en el país en las últimas semanas, por lo que alertó a la sociedad y a las autoridades para que tomen medidas que detengan la descomposición social, que a su entender, es la raíz de los actos delictivos.

La iglesia Católica transmitió su inquietud en el editorial del próximo domingo de su órgano de difusión semanario Camino, en el que sostiene que el pasado mes de agosto “quedará marcado en el calendario” por sus días tristes y grises, ante los hechos criminales que consternaron a la población, en el que un acontecimiento de horror iba sustituyendo a otro para dar paso a otro más estremecedor.

“Los hechos se iban sucediendo como una pesadilla diabólica. Los casos de Fernelis Carrión, Emely Peguero, Dioskairy Gómez, entre otros, nos presentan el diagnóstico de una sociedad enferma que va perdiendo el rumbo, alejándose cada vez más del mandato divino: No matarás”, expresó.

El arzobispado se pregunta: “¿Qué está pasando? ¿Por qué un pueblo trabajador, noble y generoso como el nuestro está frente a este carnaval de atrocidades? Se hace urgente cortar las raíces que están alimentando estas acciones bochornosas y de violencia, que nos sacuden”.

La iglesia considera que la familia debe asumir su rol de ser un espacio de compresión, diálogo y tolerancia, se debe educar para la paz y que el Estado proporcione a la población mayores posibilidades para una vida digna.

“No esperemos más descomposición social para tomar las medidas necesarias que detengan tanta violencia. Llegó la hora de sembrar esperanza. No permitamos que nos secuestren la felicidad. Que jamás nuestros días sean un amanecer lleno de incertidumbre. Que ningún mes del año se vea bañado de sangre. Que en cada página del calendario encontremos días llenos de paz, fraternidad y respeto a la vida”, concluye.

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