El negocio del vertedero de Duquesa

Hicieron de Duquesa un negocio millonario, pero cuando fueron a buscar los millones solo encontraron basura. De aquí, de allí y de más allá. Cuando era vertedero, y no negocio, se le tenía como depósito de basura y destino final de los desechos del Distrito Nacional. Lo único malo era el camino. Entonces un solo territorio y cubría todo lo que ahora es Gran Santo Domingo. No existían la provincia y los municipios, las ganancias eran menos, pero suficientes.

Con los municipios fue que vino el problema, pues la codicia quiso coger moho en tierra. No es que ahora sea mayor la cantidad de desperdicios, pero sí las alcaldías en condiciones de pagar. No es lo mismo servir y cobrar a uno que a cuatro. Además, se hicieron inversiones que hay que recuperar, pues fueron muchas las manos que hubo que mojar.

Por lo menos eso suponen los buzos, que ven como los nuevos se llenan los bolsillos, mientras ellos solo se quedan con el sucio. La dificultad está delante de los ojos de todo el mundo, menos del gobierno que no la ve ni le mete mano. ¿También esperará (como con Odebrecht) a que en junio hablen los fiscales?

Diario Libre