Plan para las armas

El país tiene que elevar a la categoría de prioridad el desarme de todos aquellos que no puedan justificar un arma.

Y tiene que diseñar guías para aquellos que pueden portar un arma.

Sabemos que los delincuentes tienen dos formas de obtener un arma de fuego: por medio de los contrabandos, que actualmente están asociados a los alijos de drogas, y quitándosela a una persona que la porte legalmente. Los favoritos en este campo son los agentes de policía que viven en barrios cundidos de drogas y que se las llevan a sus casas, y los militares y policías retirados.

A ningún policía o militar de baja graduación lo asaltan por su cartera. Los asaltan por el arma o por un celular.

La dirección de la Policía Nacional tiene que diseñar un plan imaginativo para limpiar el país de armas ilegales y tiene que ordenar a sus policías fuera de servicio que dejen sus armas en los cuarteles. Cuando esto ocurra veremos cómo las estadísticas de muertes de policías bajarán al mínimo.

Finalmente, ¿cuándo se le pondrá un chaleco identificatorio a todo el que conduzca una motocicleta? Eso cuesta mucho menos que una vida valiosa.

Diario Libre