Martelly no está bien informado
O quizás, no quiere estarlo por su crisis interna
Sin ni siquiera romper taza, los comisionados dominicanos y haitianos decidieron quedarse en su casa, y no volver a la mesa del diálogo que les había prestado Venezuela.
Un discurso por un lado y un comunicado por el otro. Martelly, presidente, lo hizo de viva voz, y Montalvo, ministro, por escrito de tercero.
La decisión, en ambos casos, no deja dudas de que las relaciones son críticas, mucho más después de que el embajador dominicano fuera llamado a consulta.
Aunque está (más que) demostrado el ánimo de rencilla, interesa saber quiénes tiraron la primera piedra, si los haitianos o los dominicanos.
Como dicen en los campos, que por la verdad murió Cristo, hay que decir que fueron los haitianos, y particularmente Martelly, en la cumbre de Caricom.
Dijo en su discurso que no confiaba mucho en los dominicanos, y que posiblemente los representantes haitianos no asistirían al encuentro de los próximos días.
La excusa no fueron las medidas que estaban supuestas a tomarse, y que todavía siguen el tintero, sino los incidentes de Neyba.
Se confundió la huida de los haitianos con repatriación del gobierno.
Sin ni siquiera romper taza, los comisionados dominicanos y haitianos decidieron quedarse en su casa, y no volver a la mesa del diálogo que les había prestado Venezuela.
Un discurso por un lado y un comunicado por el otro. Martelly, presidente, lo hizo de viva voz, y Montalvo, ministro, por escrito de tercero.
La decisión, en ambos casos, no deja dudas de que las relaciones son críticas, mucho más después de que el embajador dominicano fuera llamado a consulta.
Aunque está (más que) demostrado el ánimo de rencilla, interesa saber quiénes tiraron la primera piedra, si los haitianos o los dominicanos.
Como dicen en los campos, que por la verdad murió Cristo, hay que decir que fueron los haitianos, y particularmente Martelly, en la cumbre de Caricom.
Dijo en su discurso que no confiaba mucho en los dominicanos, y que posiblemente los representantes haitianos no asistirían al encuentro de los próximos días.
La excusa no fueron las medidas que estaban supuestas a tomarse, y que todavía siguen el tintero, sino los incidentes de Neyba.
Se confundió la huida de los haitianos con repatriación del gobierno.